De Ramón Hoyos se han dicho muchas cosas: que fue el primer ‘escarabajo’ colombiano, que ganó cinco Vueltas a Colombia, que fue campeón de la Vuelta a Puerto Rico, que fue uno de los primeros ciclistas nacionales en correr en unos Juegos Olímpicos, que llegó a vencer a corredores de la talla de Fausto Coppi y Hugo Koblet, que fue la fuente de inspiración de catorce capítulos escritos por Gabriel García Márquez con su biografía en El Espectador y que el mismo Fernando Botero pintó un cuadro en su honor.
Todo lo que he dicho, sin excepción alguna, es ciertísimo. Esas, y muchas cosas más, hacen parte del rompecabezas de la historia de este héroe del ciclismo colombiano. Cada pedalazo suyo, cada trofeo o medalla, cada amuleto de un país extraño al que fue a competir, cada fotografía, tiene una historia detrás.
Es esa la razón por la cual, el 25 de marzo de este año, la Casa de la Cultura de Marinilla, Antioquia, instaló, en uno de sus salones, un museo en memoria de Ramón Hoyos con gran parte de su colección privada de objetos, objetos que son, en el fondo, recuerdos de triunfos para muchos inolvidables. Aquí una galería de fotos, anécdotas y memorias audiovisuales de uno de los ciclistas más grandes de la historia de Colombia:
Ramon Hoyos Vallejo ganó la Vuelta a Colombia en 1953, 1954, 1955, 1956 y 1958. El primer ‘escarabajo’ colombiano fue campeón de la Vuelta a Puerto Rico en 1954 y campeón Panamericano Individual y por Equipos de Ruta en México 1955.
El pedalista marinillo también se consagró como campeón de los Juegos Centroamericanos y del Caribe. Hoyos resultó ganador de cuatro clásicos “El Colombiano” en 1955, 1956, 1957 y 1958; en este último venció a los campeones mundiales Fausto Coppi y Hugo Koblet, considerados como los mejores de la época. Gabo escribió en 1955, en 14 entregas del periódico El Espectador, la biografía de Ramón Hoyos. Los textos fueron reunidos luego y publicados a manera de libroEl pedalista paisa lideró el primer equipo de ciclístico colombiano en participar en unos Juegos Olímpicos. Fue el caso de las Justas de Melbourne de 1956. En Melbourne (1956), Hoyos compitió en compañía de los antioqueños Honorio Rúa, León Ángel Mejía y Octavio Echeverri; los cundinamarqueses Jorge Luque “El Águila Negra”, Héctor Monsalve y Pablo Hurtado, y el vallecaucano Jaime Villegas. Ramón Hoyos nació el 26 de mayo de 1932, en Marinilla, Antioquia. Fue el tercero de 17 hijos. Su padre se dedicaba a labores de agricultura
Cuando su familia se trasladó a Medellín, Ramón Hoyos abandonó sus estudios y se dedicó a trabajar en una carnicería para apoyar las finanzas del hogar. Tenía 13 años y recibía 1.50 pesos diarios entregando domicilios en bicicleta. : A los 16 años, cuando Hoyos ya comenzaba a perfilarse como una gran gloria del ciclismo, entró a trabajar en Coltejer. Allí encontró apoyo para su carrera deportiva
El ciclista paisa alternaba su tiempo entre el manejo de pantógrafos (máquinas para hacer grabados) y competencias ciclísticas. A los 26 años, Hoyos ya medía 1.73 centímetros y pesaba 68 kilos. Solo en la Vuelta a Colombia, Hoyos llegó a alcanzar 38 victorias de etapa.El 19 de noviembre del 2014, a sus 82 años, Ramón Hoyos falleció a causa de un paro cardiaco.
