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Stan Lee, el legado de sus superhéroes

Los superhéroes de Stan Lee, su legado para el mundo.

Por: Juan Carlos Garay.

La muerte del editor y guionista de comics Stan Lee ha sido una pérdida muy significativa para la cultura popular. Se trata de alguien que prácticamente vio surgir y crecer el mundo de los cómics: nació en 1922, es decir que a sus 11 años vio circular ‘Famous Funnies’, la primera revista de historietas (antes de eso, las tiras cómicas aparecían en los periódicos pero no en formato de cuadernillo).

Cuando le llegó el turno de hacer su aporte al género de los cómics, utilizó toda su formación literaria. Había leído a Mary Shelley, a Robert Louis Stevenson, y a otras figuras importantes de la literatura, y gracias a ello pudo renovar los comics, dándole un aire más trascendental y humano.

Antes de la llegada de Stan Lee como editor general de la editorial Marvel Comics, los superhéroes que existían eran invencibles. Y por ello mismo, aburridos y predecibles. Stan Lee llegó a inventar un universo donde todos los superhéroes convivían en una misma ciudad y de vez en cuando se topaban unos con otros.

Pero además tenían problemas, dudas existenciales, traumas, penas de amor. Como escribió alguna vez: “Mis superhéroes son de carne y hueso, con sus faltas y sus flaquezas; son batalladores pero, en el fondo de sus uniformes de colores, siguen teniendo pies de barro”.

Esta es una selección de algunos de sus mejores personajes.

Los cuatro fantásticos

La historia del Universo Marvel comienza en noviembre de 1961, cuando Stan Lee está a punto de dejar el mundo de los comics para dedicarse a lo que él cree que es su verdadera vocación: quiere escribir una gran novela.

Sin embargo su jefe le pide que invente una historia que tenga “un equipo de superhéroes”. Stan Lee no solo crea los personajes sino sus complejas personalidades. Se emociona tanto con el proyecto que termina escribiendo, mes a mes, la serie completa de Los Cuatro Fantásticos. Nunca escribirá la novela.

Hulk

Aunque parezca raro, este personaje no obtuvo la fama inmediata entre sus lectores. Apareció por primera vez en mayo de 1962 y solamente se hicieron seis números de la revista ‘Hulk’.

¿La razón? Era un superhéroe hostil y contradictorio: no podía controlar sus fuerzas. Stan Lee dice que se inspiró en la novela ‘El Doctor Jekyll y Mister Hyde’, agregándole detalles de la era atómica (todo es producto de un experimento con rayos gamma). Con el tiempo, la gente empezó a querer al monstruo verde.

El hombre araña

Para muchos, la obra maestra de Stan Lee. Apareció por primera vez en agosto de 1962 en la revista ‘Amazing Fantasy’. La respuesta de los lectores fue tan entusiasta que para marzo de 1963 ya tenía su propia revista.

El secreto del éxito del Hombre Araña es el personaje detrás de la máscara: Peter Parker es un estudiante de bachillerato (a medida que avanza la serie, va creciendo) al que le llegan los superpoderes por un accidente. Hay algo de telenovela en toda la historia: sus amores imposibles, el trauma por la muerte de su tío, van enriqueciendo el relato. Y claro, es inolvidable aquella frase: “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”.

Doctor extraño

Este es uno de los personajes más atípicos de cuantos creó Stan Lee. Más que tener superpoderes, lo que domina el doctor Stephen Strange es la magia. Apareció por primera vez en julio de 1963 y vino a cubrir una dimensión de la cual no podían encargarse los otros superhéroes: la de los mundos invisibles y sobrenaturales.

Algunos han dicho que Doctor Strange fue la entrada de los cómics a la psicodelia. Se sabe que los integrantes del grupo de rock Pink Floyd eran lectores regulares de sus aventuras, y por eso lo mencionan en su canción ‘Cymbaline’ de 1969.

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