100 personas evacuadas tras el desbordamiento del río Manco en Piedecuesta
Las cifras de afectados cambian constantemente pues 12 horas después de comenzada la emergencia, con las lluvias de la madrugada de este miércoles, continúan llegando reportes de daños de las zonas rurales más apartadas, y por la amplitud del territorio donde el agua entró hasta las viviendas, destruyó puentes, arrasó cosechas o generó derrumbes.
Las zonas más afectadas por el desbordamiento del río Manco y la quebrada La Grande son las veredas piedecuestanas de Boquerón, Guamo y Barro Blanco. Además de la vía Bucaramanga- San Gil, a la altura del punto conocido como Los Curos.
Por el momento se conoce que 3 personas perdieron la vida, 6 resultaron heridas y 6 más están desaparecidas, entre ellas dos menores de edad.
Abelardo y Alejandro Reyes, Isolina Lisarazo, Fabián y Merly Jaimes, además de Ingrid Fernández, son buscados por los rescatistas y personal de apoyo entre los caudales y los escombros que dejó a su paso el desbordamiento; la esperanza es que hayan tenido la misma suerte de Dilán Jaimes, el bebé de 8 meses de edad, rescatado en la vereda Guamo.
Ocurrió cerca de las 8 de esta mañana cuando un grupo de personas de la vereda iban de un lado para otro ayudando a los vecinos, corriendo piedras y pedazos árboles, buscando a los desaparecidos, cuando milagrosamente, empapado en barro, pero con vida y casi como si no lo hubiera despertado la avalancha fue encontrado.
“Nosotros ya habíamos pasado por acá (donde estaba el niño sobre unos palos), pero al regreso simplemente lo vimos, el niño estaba como dormidito. Nos dio una alegría muy grande cuando nos dimos cuenta que estaba vivo”, aseguró José Daniel Jaimes, un poblador de la zona que adelantaba la búsqueda.
Entre los abrazos de su papá, fue llevado hasta la carretera central y de allí al hospital donde bajo observación médica se recupera de las heridas.
En diálogo con Radio Nacional de Colombia, el director de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres de Santander, Cesar García, agregó que más de 100 personas han sido evacuadas de las zonas afectadas y alertó a los habitantes aledaños a la emergencia mantenerse en calma, pero en alerta, pues todavía hay algunos sectores los organismos expertos en la atención no han llegado a evaluar daños o riesgos.
“La avalancha y los deslizamientos fueron muy fuertes y eso ha dificultado llegar a algunos puntos críticos. El mensaje es calma, pero con prudencia, salirse de las viviendas que vean en riesgo, porque no sabemos si esta noche vuelvan a darse fuertes lluvias, según pronósticos del IDEAM, sí lloverá”.
Vía Curos- San Gil- Bogotá, afectada
Las lluvias de la madrugada de este miércoles no solo causaron el desbordamiento del río Manco y la quebrada Grande, sino deslizamientos de rocas y material vegetal. Uno de los puntos más afectados por este fenómeno fue la vía Piedecuesta – San Gil, a la altura del punto conocido como Los Curos.
Por lo anterior se mantiene cerrado el paso en este importante corredor vial, que comunica a los municipios del área metropolitana de Bucaramanga con San Gil, y desde este municipio con Bogotá.
Según cálculos preliminares de la Oficina Departamental de Gestión del Riesgo, habitarla podría tardar tres semanas, por esto se buscan alternativas para un paso transitorio, que facilite el tránsito de viajeros y mercancías.
Por el momento, al menos 250 hombres y mujeres de distintos organismos de socorro, el Ejército y la Policía atienden la emergencia.
