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Las voces de los Huitoto en Puerto Alegría

La cerveza, que es la primera bebida que llega hasta Puerto Alegría en el Amazonas, es la que según Eliécer Inanías Flórez, un líder indígena Huitoto, ha hecho estragos en esta población. La gran mayoría de los habitantes la consumen y los efectos del alcohol provocan altercados que terminan alterando el orden público.

La cerveza, que es la primera bebida que llega hasta Puerto Alegría en el Amazonas, es la que según Eliécer Inanías Flórez, un líder indígena Huitoto, ha hecho estragos en esta población. La gran mayoría de los habitantes la consumen y los efectos del alcohol provocan altercados que terminan alterando el orden público.

“En nuestro origen estamos también muy mal, ya nadie nos escucha nuestros ejemplos por motivo de que se aumentó aquí la bebida. Eso es lo que vino a jodernos a nosotros y a nuestros hijos. Nosotros ya somos ancianos, nosotros ya no tomamos. Como la juventud que está frente a esa bebida, nosotros estamos buscando por otro lado para que ver cómo seguimos adelante con nuestros hijos”, aseguró el líder indígena.

Don Eliecer Flórez con su familia en una de las peatonales de Puerto Alegría. Foto: Mauricio Orjuela

Para Flórez, lo más importante es que llegue hasta este corregimiento la ayuda del Gobierno Nacional, por ahora no tienen en qué trabajar o en qué ocupar su tiempo libre, por esto se siente abandonado por el Estado.

“Como indígenas fundadores de Puerto Alegría, hemos estado al frente siempre luchando por las buenas obras que viene de parte del Gobierno, pero en el recurso estamos muy mal. No tenemos ninguna ayuda por el lado del Gobierno. No tenemos cómo trabajar, habiendo tantos recursos que se escucha en Colombia por parte de las ONG’S, y países más desarrollados”, señaló don Eliecer.

Es sábado 27 de mayo de 2017, es el noveno día de nuestra misión por la Amazonía. Esta mañana zarpamos desde Peñas Blancas, fueron 60 kilómetros y 4 horas de recorrido. Hasta este punto hemos navegado unos 231 kilómetros por el río Putumayo desde Puerto Leguízamo.

Foto: Mauricio Orjuela

En Puerto Alegría se construye un tanque elevado que servirá para suministrar agua potable a los habitantes de este corregimiento. Tiene una escuela con cuatro salones grandes, dos iglesias cristianas, una católica y una maloca para los indígenas Múrui, quienes comparten el territorio con Huitotos, Ingas y Quichuas.

La orden es quedarnos en Puerto Alegría por una semana, esta es una población que supera los 400 habitantes.

Escuche aquí la crónica completa de esta historia:

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