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Esta es la situación de orden público que se vive en Bojayá, Chocó

Amenazas a líderes sociales por parte de grupos armados han hechos que las autoridades tomen medidas especiales.

Luego del arribo de las tropas de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán, que opera en el departamento del Chocó y que desde el pasado jueves 2 de diciembre se encuentran haciendo presencia en la comunidad de Pogue, Bojayá; las alarmas se volvieron a encender sobre este municipio del Medio Atrato chocoano.

En esta ocasión, se trata de las amenazas a líderes del municipio, a quienes miembros del Clan del Golfo habrían intimidado a través de llamadas telefónicas y mensajes, ordenándoles abandonar el departamento, en algunos casos, en un plazo no mayor a dos horas.

Las amenazas sobre líderes sociales como Leyner Palacio se darían como consecuencia de las declaraciones entregadas a medios de comunicación, en las cuales ponen de manifiesto la difícil situación que afronta la municipalidad.

“Temo por mi vida y la de mi familia, pero no me voy a ir, voy a seguir junto a las víctimas, voy a seguir acompañando a las comunidades de Bojayá. Al tiempo que celebró la decisión del Gobierno de incluir a otros líderes sociales en el refuerzo de las medidas de seguridad”, comentó Palacio.

Toda esta situación se presentó en medio de la visita del ministro (e) del Interior, el director nacional de la Unidad para la Atención de Víctimas y otros funcionarios nacionales, quienes se desplazaron hasta Bojayá con la intención de acercar las instituciones no militares del Estado a las comunidades, además de ratificar la presencia institucional en el territorio, como lo declaró Ramón Alberto Rodríguez, director de la Unidad para la Atención de Víctimas.

Daniel Palacios, ministro (e) del Interior aseguró desde Quibdó que “ningún grupo armado va a decirle a los líderes sociales qué hacer y qué no hacer en el país” y añadió que la seguridad de Leyner Palacio y otros líderes de la región, sería reforzada inmediatamente por orden presidencial.

Leyner Palacio, uno de los líderes amenazados, fue candidato junto a un grupo de víctimas de Bojayá al Premio Nobel de Paz en 2016, además, fue galardonado en representación de su comunidad con el premio Mundial al Pluralismo del año siguiente. Palacio, centra su trabajo en la reparación colectiva de las víctimas de la masacre del año 2002, la restauración del tejido social de la región y el esclarecimiento de los hechos victimizantes del Medio y Bajo Atrato chocoano.

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