El 28 de septiembre de 2003, las extintas Farc realizaron un atentado en Florencia, Caquetá, en el que fallecieron 11 personas y 56 más resultaron heridas. Por estos hechos dos personas fueron capturadas señaladas de participar en este ataque terrorista.
A estas personas se les impuso medida de aseguramiento por los delitos de homicidio agravado, homicidio en persona protegida, homicidio en grado de tentativa en persona protegida, utilización de medios y métodos de guerra ilícitos, terrorismo, daño en bien ajeno y rebelión, pero, a pesar de que se fugaron, fueron declarados inocentes.
Una vez salieron libres, demandaron a la Fiscalía para que los reparará con más de 300 millones de pesos por su privación injusta de la libertad, solicitud a la que el Tribunal Administrativo del Caquetá accedió y por lo tanto el ente acusador apeló el fallo que llegó al Consejo de Estado que revocó esta condena.
Resaltó el alto tribunal que a pesar de que la Fiscalía no demostró la responsabilidad penal de estas dos personas, la privación de la libertad no fue injusta.
“No había lugar a conceder la reparación directa, pues si bien no se logró probar que fueran responsables de los ilícitos que se les imputaban a los demandantes, sí se reunieron los indicios graves de responsabilidad que la ley exigían en el momento de llevarse a cabo esta actuación penal para proferir la medida de aseguramiento", concluyó el Consejo de Estado.