Pasar al contenido principal
CERRAR

Secuelas del Covid-19: consecuencias pendientes por descubrir

Los expertos están trabajando para obtener más información acerca de los efectos de salud a corto y largo plazo asociados al Covid-19.

Por: María Camila Sánchez

Hablar de secuelas del Covid-19 es exponer una larga lista de efectos que resultan ser muy diferentes entre pacientes y que aún se encuentran en evaluación por parte de la comunidad médica y científica, pues no se sabe con exactitud por qué son tan disímiles o cuál es su duración real.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades CDC, en su portal en español señalan lo siguiente: “aunque la mayoría de las personas con Covid-19 mejora al cabo de unas semanas o meses de haber estado enfermas, algunas no lo hacen. Los CDC y expertos de todo el mundo están trabajando para obtener más información acerca de los efectos de salud a corto y largo plazo asociados al Covid-19”.

En Contacto Directo, la doctora Milena García, internista y neumóloga del Hospital San Ignacio y docente de la Pontificia Universidad Javeriana, explicó que los médicos siguen conociendo este Sars-COV-2, el cual durante su desarrollo ha mostrado que sus principales afectaciones están en las cédulas respiratorias, pero no son los únicos efectos.

“Este virus tiene un compromiso multisistémico; muchos efectos pueden estar presentes hasta cuatro semanas después de superar la enfermedad y eso ya se denomina como ‘Covid largo’. Hay otro grupo de personas que, independientemente de la gravedad de la enfermedad, pueden cursar el ‘síndrome postCovid’, que se presenta 12 semanas posteriores al capítulo más agudo de la enfermedad y puede afectar principalmente el sistema respiratorio con ahogo y tos persistente, fatiga, y otros impactos como caída del cabello, pérdida de la memoria, embolias pulmonares, trombos y compromisos cardiovasculares”, explicó.

La razón específica por la cual estos efectos pueden ser tan diferentes entre un paciente y otro aún no ha sido identificada. De acuerdo con García, muchos factores se pondrán en juego para determinar qué secuelas tendrá el paciente una vez superado el virus, tales como comorbilidades, obesidad, hábitos alimenticios, entre otros.

La explicación tal vez tomará un par de meses más para poder ser dada por parte de la comunidad científica, lo que sí está claro es que un paciente que estuvo en una Unidad de Cuidados Intensivos UCI tendrá mayores efectos que un paciente que logró manejar la enfermedad en casa.

“Aún estamos en un punto temprano de la evolución de la enfermedad para poder determinar si las secuelas son temporales o permanentes para algunos pacientes. Cuando hablamos de las secuelas recordamos lo que sucedió con el Sars-1; muchos pacientes tuvieron pérdida de la función pulmonar y a los cuatro años lo recuperaban. Debemos esperar porque solo el tiempo nos dirá qué tanto se puede recuperar”, dijo.

Más allá de las secuelas físicas, García advirtió que las consecuencias mentales son tan o más preocupantes, razón por la que, si un paciente siente que la situación sobrepasa sus límites, debe acudir a una ayuda psicológica.

“La afectación mental es uno de los síntomas más reportados en la literatura médica. Más allá de una afectación hecha por el virus propiamente, debemos recordar que todos los seres humanos tenemos mecanismos de ajustes frente a las circunstancias de la vida, pero cuando alguien enferma por Covid-19 también se llenará de temor, se tendrá que aislar y afrontarlo solo. Esta es una enfermedad que impacta fuertemente lo emocional y sobrepasa, en muchos casos, los mecanismos compensatorios que el cuerpo tiene”, expuso.

De acuerdo con los CDC, muchas afecciones posteriores al Covid-19 pueden incluir los efectos a largo plazo de la hospitalización o del tratamiento suministrado, por ello es usual que se presenten atrofias musculares, dado que, ante el largo periodo de tiempo en el que el paciente debe permaneces estático, buena parte de sus funciones se verán afectadas y volver a actividades básicas como caminar, podrían ser un verdadero reto.

“Estamos diseñados para movernos. En periodos largos de inmovilidad (a pesar de terapias físicas), los pacientes en UCI u hospitalización tienen más posibilidades de generar atrofia muscular que se refleja en fatiga, que es un mayor cansancio o dificultad para hacer actividades de la vida diaria y a eso se le suma la respuesta al tratamiento que se suministra para tratar el Covid, que en este caso consiste en un medicamento que da una respuesta inflamatoria”, indicó.

Ante los efectos de este virus, García aclaró que es indispensable que todo paciente que supere el virus tenga una rehabilitación pulmonar, que consiste en ejercicios dirigidos por un profesional de la salud y a través del cual podrá recuperar la fibra muscular perdida en el área pulmonar.

ETIQUETAS