¿Por qué marchan los agricultores del Meta?

Por: Jhoan Ticora Sánchez

Campesinos y productores agrícolas del departamento del Meta viven actualmente una difícil situación, al punto de que buena parte del sector ha pedido al Gobierno Nacional que se declare la emergencia económica, para que se les permita saldar sus deudas vigentes con los bancos y poder preservar los cultivos.

Según Estiven Navarro, líder de la Asociación de Agricultores y Ganaderos del Meta, Agameta, y del Comité por la Defensa Agrícola Campesina del Ariari, cada semana en esta zona de los Llanos colombianos se realizan entre dos y tres remates de fincas a campesinos, que no han logrado salir de la crisis que afrontan desde el año 2010.

“Nuestros cultivos se pierden porque no hay quién compre los productos que con esfuerzo y una alta inversión tratamos de sacar al mercado, cuando logramos encontrar a un comprador, este se aprovecha de la situación y termina pagando lo que quiere o engañando al agricultor. Por esta razón muchos de los lotes de productos terminan dañándose”, señala Navarro.

La región del Ariari en el Meta es considerada una de las despensas agrícolas de Colombia; personas que trabajan el campo manifiestan que en estas tierras se cultivan productos como la papaya, guayaba, plátano, yuca, maíz, piña, entre otros; y que se han convertido en el sustento para más de mil familias en la zona, de la que hacen parte Vista Hermosa, Granada, Puerto Rico, Fuente de Oro y La Macarena.

Entre las razones que encuentran los campesinos en la crisis que afrontan, están la baja de precios de los productos agrícolas en el mercado, la ausencia de mecanismos efectivos para la comercialización, una abrumadora competencia desleal, el valor desmesurado de los insumos y la falta de incentivos económicos del estado para la producción y modernización en el campo.

Sin embargo, el secretario de Desarrollo Agroeconómico del Meta, Alberto Castro, encuentra otro factor preocupante como causa de la emergencia económica de los productores agrícolas.

Su tesis tiene que ver con la intermediación que hay actualmente en el mercado para la puesta de un producto sacado del campo, y que finalmente pone en desventaja a quien trabaja la tierra.

“El origen de la situación se debe en gran parte porque los precios de los productos frescos los establece Corabastos en un mercado desigual, donde hay unos monopolios de compradores que imponen el valor a pagar, afectando a los productores. Además, existe una gran cadena de intermediarios”, señaló Castro.

Tal es el escenario de desconfianza y desesperación del sector agrícola en la región, que cientos de campesinos se abocaron a las calles en días pasados, para exigir a las autoridades del orden departamental y Nacional un pronto alivio a su situación, pues muchos de ellos se han declarado en la quiebra.

Los agricultores marcharon desde el viernes 6 de abril por la Ruta del Embrujo Llanero o también conocida como la Ruta Turística del Ariari, desde el municipio de Granada, pasando por San Martín, el sector de Humadea, Guamal, Acacías y hasta llegar a Villavicencio; durante seis días. Su objetivo era un encuentro con el Ministro de Agricultura, Juan Guillermo Zuluaga.

Después de gestiones de diferentes personalidades políticas del departamento, se logró un encuentro entre voceros de los campesinos, autoridades departamentales y el ministerio de Agricultura, donde surgieron varios compromisos para ponerle freno a la desaceleración económica del sector.

Entre los acuerdos que se pactaron en dicha reunión está la declaratoria de una resolución, que permitirá el desembolso de mil millones de pesos a los agricultores, con el fin de reactivar la producción y la inversión en estrategias para la puesta de los productos en el mercado, garantizando la competencia en igualdad de condiciones.

Asimismo, según Sandra Milena Riaño, representante de pequeños y medianos agricultores, se planteó crear mesas de seguimiento semanales para monitorear y evaluar la variación del costo de las cosechas, y la oferta de los cultivos a precios que generen ganancias justas al campesinado.

De otro lado la secretaría de Desarrollo Agroeconómico del Meta, se comprometió a articular con la Central de Abastos de Villavicencio, para que a través de un aplicativo se efectué la compra directa en línea a los productores agrícolas, y de esta manera eliminar la cadena de intermediarios, que, según esta cartera, le quita al campesino buena parte de la ganancia que le corresponde.

Agricultores como Estiven Navarro y Sandra Riaño, nuevamente han regresado a sus cultivar sus tierras, con la esperanza puesta en estos nuevos acuerdos pactados con el gobierno central, y esperando a que no solo se les dé cumplimiento, sino también a que sean el alivio definitivo a la crisis.

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