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Yuri Alvear: así es la vida en cuarentena de una medallista Olímpica

La judoca se encuentra en Cali pasando aislamiento y entrena en su casa y por videollamadas.

Por Thomas Beltrán Lozano

A la judoca colombiana Yuri Alvear, la cuarentena la tomó por sorpresa y nunca imaginó que fuera a tomar tanto tiempo la pandemia mundial. La vallecaucana se disponía a competir en Marruecos en un evento que daba puntos para clasificar a los Juegos Olímpicos, y fue cancelado, así como las demás competencias que estaban planeadas este año en el calendario deportivo.

Por cosas de la vida le tocó enfrentar este aislamiento en Cali, junto a su novio, pero lejos de su familia en el municipio de Jamundí, Valle del Cauca. Lo que más duro le ha dado a Yuri es que no ha podido ver a sus padres, a los que visitaba dos o tres veces a la semana, y ahora lleva dos meses sin poder darles un abrazo.

Ha tenido que adaptarse a lo que el mundo le está planteando y son los entrenamientos desde casa, a través de videollamadas y sin muy buenas condiciones de espacio y de disciplina.

“Es difícil para uno, 20 años practicando el judo, en competencias, viajes y concentraciones, que de un momento a otro tener que empezar a hacer entrenamientos en casa, por videollamadas. Es un cambio fuerte pero hay que ver lo positivo”, dice la deportista con algo de resignación.

Su rutina diaria en esta época de aislamiento empieza a las 7 de la mañana con entrenamiento físico, después prepara ella misma el desayuno, el almuerzo y la cena, y si le queda tiempo ve algunas películas y lee libros que es algo que le gusta y la prepara mentalmente.

“La lectura es muy importante para mí, todos sabemos que el deportista tiene que desarrollar su mente y los libros han sido fundamentales para crecer en esa área”, señaló la judoca.

Las anécdotas están a la orden del día, y la que más recuerda, es cuando en el edificio en el que vive entrenaba subiendo y bajando escaleras hasta le llegó un correo de la administración en el que le prohibían esa forma de entrenar porque las encargadas del aseo no podían estar todos los días desinfectando las zonas por las que pasaba la deportista.

También recuerda con algo de gracia, que su novio ha tenido que ser su rival de entrenamientos y por culpa de eso se ha llevado algunos golpes fuertes que ratifican lo que pensaba al principio: que el judo es un deporte exigente.

Alvear ha querido aprovechar al máximo el tiempo que tiene en casa y por eso ha aprendido a cocinar y dice con orgullo que ya sabe preparar pandebonos, una deuda que tenía pendiente por estar concentrada en su deporte, pero que no se perdonaba que como vallecaucana no supiera hacer una de las comidas típicas de su región.

Finalmente dice que el aplazamiento de los Juegos Olímpicos le servirá para seguir su preparación física y llegar lo mejor posible por la medalla de oro, que es la que le falta en su palmarés.

“Mi entrenador me decía que hay que tener una mente positiva, estar preparados para cuando vuelva la competencia en cualquier momento. Lo importante es que se tiene un objetivo claro y hay que trabajar duro. Se puede seguir trabajando, mejorando y conociendo rivales para llegar con posibilidades de medalla de oro en los Olímpicos”, expresa.

Yuri Alvear cree que es duro por lo que pasa el mundo, pero en lo personal trata de tomarlo de la mejor manera. Ha descubierto que hay mucho por aprender, que hay que dedicar tiempo a nuevas labores y que la familia no la cambia por cualquier medalla de oro. Para finalizar hace sus recomendaciones de dos películas para ver: ‘El Hogar’ y ‘Extremadamente cruel, malvado y perverso’, así esta última pueda parecer los adjetivos contra el coronavirus, que cambió la vida del mundo entero.

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