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Un piano que suena a Colombia

Su música se escucha de nuevo y por él ha pasado un buen número de intérpretes contemporáneos.

Existe solo una frase para comenzar un párrafo sobre El show de Jimmy: “Hola, amigos, bienvenidos a la hora con más música”. La misma que que sonó todos los jueves a las 8:30 de la noche desde 1971 hasta 1993 en la voz de Jaime Alberto Salcedo Tafache, el pianista y presentador nacido en Mompox que hacía las veces de anfitrión.

Fue un magazín musical que alternaba entrevistas, sketches humorísticos, secciones de baile y presentaciones de artistas. Que se grababa en los estudios de Inravisión y que Jimmy Salcedo conducía desde un piano Bösendorfer, el mismo que hoy descansa en el tercer piso de RTVC, justo en frente de las oficinas de Radio Nacional de Colombia.

La historia viene de mucho más atrás. En 1828, el austriaco Ignacio Bösendorfer, aprendiz del famoso fabricante de pianos Joseph Brodman, fundó su propia compañía, se convirtió en uno de los mejores del mundo y, tras sobrevivir a dos guerras mundiales, es el favorito de todos los pianistas rusos por la suavidad de su pulsación y el color de su sonido.

Veinte años más tarde, desde Colombia le fueron encargados varios pianos de cola a nombre del señor Fernando Medel, un empresario melómano y apasionado por las artes.

La llegada de los pianos de Medel coincidió con el nombramiento de Fernando Gómez Agudelo como director de la entonces Radiodifusora Nacional de Colombia, durante el gobierno de Rojas Pinilla, el comienzo de la televisión en 1954 y la necesidad imperiosa de contar con pianos de buena calidad durante las emisiones, como no existía aún la música grabada cualquier musicalización debía hacerse en directo y con intérpretes en vivo.

Gómez Agudelo, que además de abogado era pianista, le compró a Medel el Bösendorfer que por muchos años usaría la Televisora Nacional.

Durante sus primeros años, la programación se hizo con propósitos culturales y educativos, y se llenó con conciertos, obras de teatro, ballets y zarzuelas. El Bösendorfer se convirtió en el protagonista oficial de la televisión colombiana y el argentino Luis Bacalov -nominado dos veces a los Premios Óscar por mejor música original- en su pianista oficial: aparecía tocando tangos, acompañando coreografías de baile o interpretando obras de música clásica.

A Bacalov le siguieron Clara Correa, Jaime Llano González y Fernando León Rengifo. Y por el Bösendorfer pasó una lista larga de músicos pertenecientes a todos los géneros: Oriol Rangel, Lucho Bermúnez, Blanca Uribe, las voces del ‘Club del Clan’, Joan Manuel Serrat y los artistas de ‘Música para todos’.

En 1993, cuando dejó emitirse el ‘Show de Jimmy’, el piano fue archivado en una de las bodegas de Inravisión, que para entonces quedaba en la actual Biblioteca Nacional. Al no poder competir con la música pregrabada que presentaban los canales privados, los programas musicales fueron desapareciendo y la audiencia dejó de extrañarlos con el auge del melodrama.

En el 2009, el piano fue restaurado y devuelto al Sistema de Medios Públicos en donde ha vuelto ser utilizado por Radio Nacional de Colombia en espacios como ‘La Onda Sonora’ y ‘Un cuento para contar’ de la emisora Señal Clásica.

Su música se escucha de nuevo y por él ha pasado un buen número de intérpretes contemporáneos. En la próximas semanas, este Bösendorfer se alista para salir de las instalaciones de RTVC y recorrer el país con la gira ‘Escalas por Colombia’, junto a la iniciativa Pianomóvil. Llegará a los municipios de Zipacón, Chinchiná, La Virginia, Cartago, La Cumbre, Venadillo y Agua de Dios para seguir siendo testigo de la historia nacional.

Vea aquí ‘El piano’, un documental realizado por Señal Colombia en el año 2009.

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