“El raizal siempre busca a sus paisanos, es un tema de solidaridad”: Miss Maura Watson

El proceso organizativo de la comunidad del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina residente en Bogotá, se ha venido gestando desde el momento mismo en el que los primeros isleños llegaron a la capital con el propósito de realizarse profesionalmente en 1968.

Miss Maura Watson, nacida en la isla de Providencia, vive hace 40 años a Bogotá y actualmente es la vicepresidenta de la Organización de Raizales Fuera del Archipiélago. Durante más de 20 años ha sido docente en diferentes instituciones de educación media y superior en Bogotá. Desde su llegada a la ciudad capital se ha desempeñado como tallerista en los procesos de recuperación de la lengua materna creole y la tradición oral de la comunidad raizal. Hablamos con ella sobre la histórica presencia los raizales en la ciudad capital.

¿De dónde nace la idea de crear la Organización de Raizales en Fuera del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina?

La organización se creó en 2004. La idea surgió con el fin de organizar a la comunidad raizal que habita fuera del archipiélago en torno a la preservación, conservación y difusión de todas nuestras manifestaciones culturales. Además, buscábamos promover la unión, solidaridad, ayuda y respeto mutuo entre los miembros de la comunidad raizal, como una forma de preservar y fortalecer nuestros valores culturales y espirituales heredados de nuestros ancestros.

Actualmente yo dicto talleres de creole, en agosto celebramos el día de la emancipación raizal, cuando fue liberado el primer esclavo en el archipiélago y en noviembre realizamos la Semana Raizal en Bogotá. Trabajamos mucho en visibilizar nuestra cultura y en el fortalecimiento de nuestras costumbres.

¿Hace cuánto está vinculada a la organización?

El raizal siempre busca a sus paisanos del archipiélago, es un tema de solidaridad. La mayoría de isleños que llegan a esta ciudad lo hacen porque vienen a estudiar y luego se van. La organización siempre está abierta para quienes llegan por primera vez a Bogotá. Desde hace 10 años estoy vinculada a la organización y desde hace dos periodos soy su vicepresidenta.

¿Desde qué año se registra presencia de comunidad raizal proveniente del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina?

En Bogotá se registra presencia de comunidad raizal desde 1968. Siempre hemos tenido presencia en esta ciudad pero no en la misma magnitud que ahora. Actualmente en Bogotá vivimos 1350 raizales.

¿Cuáles son los principales motivos para salir de las islas?

En los últimos años la principal razón para salir de las islas es por temas de acceso a la educación. El número de personas que salen de las islas en busca de empleo no es tan alto.

¿Isleños o raizales?

A ciertas personas no les gusta el término raizal, sobre todo a las personas mayores. Tengo amigos que dicen de frente “no me diga raizal, dígame isleño”. Se sienten más cómodos con esa terminología. A mí no me molesta que me digan raizal, siempre y cuando exista respeto para las personas que somos del archipiélago.

¿Cómo es el proceso de adaptación de un raizal a la ciudad de Bogotá?

El raizal sufre mucho con el cambio en la gastronomía. Nuestra gastronomía es totalmente distinta a la del resto del país. En mi caso sufrí mucho con el tema de la alimentación. Un punto de choque es nuestra lengua nativa, creo que aún se presenta discriminación hacia el creole, no en la misma magnitud de hace 40 años cuando yo llegué a esta ciudad, pero se sigue presentando. En mi época se burlaban de nosotros, la gente no entendía lo qué hablábamos. Un punto a favor es que nosotros dominamos el creole, el inglés y el español.

¿Cuáles son los principales espacios de encuentro de los raizales en Bogotá?

Uno de los principales puntos de encuentro es la Iglesia Bautista, nos reunimos cada tercer domingo del mes, para los isleños es muy importante el aspecto espiritual. También nos reunimos en cada una de las actividades culturales que realizamos en la organización.

¿Cómo ve el panorama de la disputa territorial y delimitación marítima entre Colombia y Nicaragua?

Hace falta decirle al pueblo raizal qué está pasando. Necesitamos saber cuál es la realidad nuestra en este momento.

¿Qué es lo que más extraña un raizal cuando parte de su isla?

Lo que más extrañamos es la familia y la gastronomía. Siempre es difícil adaptarse a una nueva cultural. Ahora es más fácil la comunicación, en la época que llegué a Bogotá comunicarse con las islas no era tan fácil, lo hacíamos por medio de cartas y estas se demoraban mucho en llegar.