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¿Cómo afecta la actividad agrícola a las zonas de páramo?

El 15,4 % de la cobertura y la vegetación nativa de los 36 páramos del país ha sido reemplazada por las fronteras agrícolas.

Por: Catalina Vega

En Colombia se encuentra el 50% del total de los páramos del mundo. Son 36 páramos que proveen el 70% del agua que se consume en todo el país, según cifras emitidas por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible. Por sus ubicaciones, estos ecosistemas tienen una relación directa con los campesinos, que en los últimos años, no viene siendo la mejor.

La expansión y el desarrollo de actividades del hombre ha configurado una parte significativa de los ecosistemas de los páramos o también denominados de alta montaña, de acuerdo con investigaciones del Instituto Alexander Von Humboldt, el avance de estas actividades ha causado grandes pérdidas.

Por ejemplo, el 15,4 % de la cobertura y la vegetación nativa de los 36 páramos del país ha sido reemplazada por las fronteras agrícolas, principalmente por pastos y cultivos dispuestos para productos como la papa y la cebolla.

“Los páramos del país han sido históricamente habitados, en muchos casos han sido ocupados como iniciativas del Estado o incluso, como el resultado de una larga historia de desplazamientos en el país; en los años 60, aún se pensaba que los páramos debían estar al servicio del sistema productivo. Por estas razones, debe entenderse que los campesinos no son los culpables de la situación actual de los páramos, sino que el problema es de todo el sistema productivo”, aseguró Paula Ungar, investigadora del Programa de Gestión Territorial de la Biodiversidad del Instituto Humboldt.

Foto: Ministerio de Ambiente

Para Diego Moreno especialista en agronomía, los páramos deben cuidarse ya que las técnicas realizadas por el hombre podrían acabar con ellos, lo que sería perder parte del suministro de agua que sale por las cuencas.

"Los páramos son muy vulnerables por la altura a la que se encuentran y por el ecosistema en el que se desarrollan, los rayos solares son directos y el oxígeno es escaso, ellos se demoran mucho en crecer por las bajas temperaturas y a la alta exposición solar”, señaló Moreno.

¿De qué manera pueden seguir cultivando los campesinos sin afectar los páramos?

El especialista en agronomía añadió que en caso de que sea necesario el uso de terrenos de páramo, lo ideal es usar técnicas no invasivas o también denominadas ‘punto a punto’, "sembrando, por ejemplo, papa en un punto y otra parte de la producción en otro lugar del páramo, esto disminuye mucho la densidad del cultivo, pero permite sembrarlo y que el ecosistema del páramo no se altere”, agregó.

Según el Instituto Alexander Von Humboldt, en el mapa general de ecosistemas de Colombia se identificaron un total de 1´379.000 hectáreas de páramos en todo el territorio, es decir, el 1.3 % de la extensión del país. Boyacá, con el 18% de hectáreas es el departamento que más alberga estos ecosistemas, seguido de Cundinamarca (13%), Santander (9%), Cauca (8%), Tolima (7.9%), y Nariño (7.5%).

Por esta razón, la implementación de estrategias que velen por el cuidado ambiental de los páramos, y que, a la vez brinden garantías de productividad y sustento para los campesinos que habitan cerca de ellos, requieren cada vez más prontitud, dicen los expertos.

Foto: Ministerio de Ambiente

"Lo ideal es disminuir al máximo la intervención humana en esas áreas porque cuando nosotros metemos ganado o sembramos, lo que hacemos es destruir esas plantas que capturan la lluvia horizontal y el páramo literalmente se seca", aseguró Diego Moreno, experto en agronomía.

Desde las Corporaciones Autónomas Regionales, han empezado a trabajar con los campesinos para que puedan realizar sus cultivos o siembras con bajo impacto, con producción limpia para el ecosistema evitando el uso de químicos y tratando de no ampliar la frontera agrícola.

Cabe aclarar que en proceso se encuentra la ejecución de la Ley de Páramos por parte del Ministerio de Ambiente, donde especificará la delimitación de estos ecosistemas para determinar el territorio que le pertenece a los páramos y el que les pertenece a los campesinos y, donde además, establecerá asuntos de minería.

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