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Hermanas Tovar, las jugadoras de squash con más proyección en Colombia

Laura y María Paula Tovar juegan juntas en el equipo femenino de squash de Colombia, que ganó bronce en los Panamericano.

Por: Thomas Beltrán Lozano

No es muy común ver a dos hermanas practicar un deporte de alto rendimiento y mucho menos que ambas sean exitosas. Pero en la delegación colombiana que participa en los Juegos Panamericanos de Lima, hay un caso en el squash y tiene nombre propio: Laura y María Paula Tovar.

Son bogotanas, nacieron en medio del squash, su padre lo practica y su hermano mayor llegó incluso a integrar la Selección Colombia de este deporte. No había manera de que Laura y María Paula se libraran de la responsabilidad de estar en el deporte.

“Son muchos momentos felices, hemos vivido dos meses juntas, sin separarnos, para prepararnos para los Panamericanos, y hemos compartido todo, y da emoción compartir medallas y triunfos entre nosotras”, dijo Laura, la mayor de las hermanas Tovar.

María Paula tiene la alegría de la hermana menor. Todo el tiempo molesta, no se toma las cosas tan en serio excepto cuando está en la cancha. Fuera de ella es la que le imprime la felicidad al equipo colombiano de squash, que las ven como las niñas que hay que consentir y cuidar.

“En los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla mi hermana hizo su primera aparición y supo manejar la presión para la final en dobles. Yo la apoyé, yo jugué pero la medalla fue totalmente de ella. Hizo lo que tenía que hacer y estoy orgullosa de ella, de lo que hace, de lo que ha aprendido, la felicito mucho”, expresó Laura.

Al momento de preguntarles por lo que más admiran de la otra, se rinden en elogios por su hermana. María Paula admira de Laura la experiencia, el cariño y el amor que le tiene. Laura por su parte dice que María Paula es alegre, valiente y guerrera.

Como buenas hermanas no son ajenas a las peleas en la cancha. Se exigen mutuamente y siempre quieren ganar. “En la cancha discutimos, nos hacemos comentarios serios. Como nos conocemos chocamos más, como si no fuéramos hermanas. Por fuera de la cancha nos adoramos y queremos que la otra sea mejor”, afirmaron.

Conocerlas mejor

Ambas respondieron estas preguntas para conocer a las jugadoras con más proyección del squash en Colombia.

La más puntual: “Es María y siempre está en lo que está”.

La que juega mejor: “Ambas. Tenemos estilos diferentes y nos complementamos bien”.

La más desordenada: “Laura es desordenada, deja todo botado y me toca estar pendiente del orden, pero ha mejorado”.

La que más pelea: “Laura, me enojo fácil, pero es de concentración. Es para ponerme las pilas”.

La más alegre: “No tiene discusión, es María”.

En lo deportivo llevan toda la vida entrenando juntas y para los Juegos Deportivos Nacionales de 2015 fueron convocadas por primera vez para jugar en pareja como profesionales. En estos Juegos Panamericanos de Lima 2019 consiguieron la medalla de bronce en la modalidad de equipos femenino, que también integró Catalina Peláez.

Por ahora seguirán participando en competencias del ciclo olímpico y esperan llegar a ser una pareja de hermanas tan exitosas como lo fueron las estadounidenses Venus y Serena Williams para el tenis.

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