"¿Quiere cacao?" Conoce cómo es la comunicación de los loros con su entorno

Existen diferentes factores que favorecen la habilidad imitativa de los loros, por ejemplo la estructura de su cabeza, su sistema respiratorio único y los músculos que posee en su tráquea.

Mateo Pérez

Los loros son animales extraordinarios, peculiares y causan una reacción positiva en los seres humanos, ya que repiten lo que les dicen, emiten formas de comunicación de otras especies, cantan a todo pulmón y hasta insultan cuando nadie se lo espera. Pero, ¿qué hay más allá de esta habilidad que tienen los loros? y la pregunta clave del asunto, ¿realmente pueden hablar?


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Se les considera en el selecto grupo de especies que son “aprendices vocales”, ello implica que los loros reproducen y diferencian los sonidos que están en sus entornos, es decir que los imitan. Por lo cual, no es cierto afirmar que los loros hablan, ya que los seres humanos somos los únicos que tenemos esa capacidad, a pesar de que estos animales aprenden de las palabras que escuchan durante su tiempo de vida.

Existen diferentes factores que favorecen la habilidad imitativa de los loros, por ejemplo la estructura de su cabeza, que la compone un pico grande, su sistema respiratorio único y los músculos que posee en la tráquea. Al igual que la mayoría de las aves, los loros tienen siringe, un órgano fonador en forma de caja ósea, el cual se encuentra ubicado entre la tráquea y los bronquios primarios y que les permite silbar.

En el caso de los loros, la siringe consta de anillos ensanchados y fusionados, permitiéndoles replicar los sonidos a su alrededor.

La ciencia ha avanzado en profundizar este hecho. En el año 2015, un equipo de investigadores en la Universidad de Duke descifraron la clave en el cerebro de los loros, el cual se diferencia del resto de las aves cantoras. Este órgano presenta unos núcleos que controlan el aprendizaje, así como unas conchas que se encuentran conectadas al cerebro y se involucran en los procesos de aprendizaje vocal. Cabe añadir que las conchas tienen más peso en las especies de loros que imitan el habla humana. 

Otros investigadores, como la psicóloga Irene Pepperberg, encontraron que la especie de loro que es más parlanchina es el yaco o loro gris de cola roja, alojado en la selva tropical africana. Además, quiso demostrar que los loros no se limitaban a repetir palabras, sino que eran capaces de entender su significado y manejarlo a criterio, pero los estudios más recientes sugieren que estos las repiten como una forma de estímulo provocado por su entorno y no presentan tal capacidad cognitiva de comunicación. 

Algunas de las especies de loros que pueden hablar son: el loro gris africano o psittacus erithacus, los loros amazónicos, el loro eclecto o eclectus roratu, el periquito o melopsittacus undulatus y la cacatúa o cacatuidae. 

Por lo anterior, en el Día Mundial del Loro el llamado es para la conservación de estas especies, ya que algunas se reportan como especies amenazadas, entre otras cosas, por el tráfico ilegal de animales. En Colombia, el Loro coroniazul está en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), debido a la escasa población que tiene, como también por las amenazas en su territorio por la extracción de madera.