Indígenas emberá ubicados en Parque La Florida retornan a Risaralda
En la noche de este miércoles, 127 familias que estaban en la UPI de la Florida volverán a Pueblo Rico y Dokabú en Risaralda.
460 indígenas serán trasladados a sus resguardos gracias a una labor conjunta entre la Alcaldía de Bogotá a través de la Alta Consejería de Paz, el Ministerio del Interior y la Unidad para las Víctimas.
Mientras que el Distrito se encargó del traslado de los enseres, de conseguir los buses para el viaje de los indígenas y de garantizar las condiciones de bioseguridad, además de la alimentación, el Gobierno Nacional generó las condiciones mínimas para este retorno y la sostenibilidad del mismo.
“Se trabajó arduamente con todas las instituciones para definir unas rutas y estrategias para el retorno de la comunidad Embera, que se encuentra en situación de desplazamiento en Bogotá, hacia sus territorios ancestrales. El Gobierno Nacional garantizará las condiciones de seguridad. Esto es una prueba del compromiso de Bogotá para con las víctimas que han tenido que desplazarse por la violencia”, dijo Vladimir Rodríguez, Alto Consejero de Paz, Víctimas y Reconciliación.
Todas las personas que saldrán de Bogotá serán valorados médicamente y se adelantarán los trámites correspondientes para que puedan continuar escolarizados.
Los indígenas Embera Chamí salieron a marchar por las calles de Bogotá el pasado 29 de septiembre y una parte de ellos se quedó en el Parque Nacional, en donde las condiciones de vida no son las adecuadas, incluso el fin de semana murió un niño de la comunidad.
Se espera que con el retorno, los indígenas que se encuentran en el parque Nacional acepten trasladarse al de la Florida, en donde hay mejores condiciones de alojamiento.
