“El cuerpo es y ha sido el blanco del conflicto social en Colombia”: María José Arjona
Por: Laura Quiceno. Editora web.
María José Arjona es la ganadora de la primera edición del Premio Museo La Tertulia de Cali-Colombia. Fue seleccionada por el jurado conformado por el artista Óscar Muñoz, la consultora en arte Ana Sokoloff y la directora del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, Victoria Noorthoorn.
La obra de María José sorprende por la indagación sobre el cuerpo y la evolución del performance en Colombia desde ‘Avistamiento’ pasando por ‘Pero soy el tigre’ hasta ‘Línea de vida’.
“Su trabajo me parece fundamental para el arte y el de varios artistas que se dedican al performance en Colombia; parece una especie de arte urgente en este contexto; poner el cuerpo en juego es entregarlo todo, la vida misma, este país ha sufrido mucho a lo largo de la historia y pareciera que en el fondo una de sus causas fueran los imaginarios atávicos que se tienen con el cuerpo, hay que liberar el cuerpo y una de las labores del artista esta precisamente en sugerir caminos y crear herramientas para que esta liberación sea posible” cuenta el artista y curador Jorge Barco.
Hablamos con María José sobre este premio:
¿Qué significa poner el cuerpo en su obra?
Significa entender el cuerpo como eje de todo un proceso creativo, efímero y en donde la experiencia es lo más importante.
¿Cuál ha sido la evolución de su obra? ¿Cuál es el principal aprendizaje?
Creo que hacerse a un cuerpo capaz de entender las problemáticas sociales, políticas, ambientales, económicas y humanas, es un proceso de toda la vida y también un aprendizaje. El cuerpo es una entidad en constante cambio, es una materia flexible en la que el tiempo ejerce un efecto y desde ese efecto temporal pero también rítmico, nos vamos haciendo a las herramientas necesarias para plantear espacio de reflexión y afirmación de la vida.
Hábleme un poco sobre su obra “Pero soy el tigre" ¿Está inspirada en Jorge Luis Borges?
‘Pero soy el tigre’ es una obra que nos hace pasar por la experiencia del tiempo no solo desde su aspecto cronológico sino más bien desde una multiplicidad de desdoblamientos que ocurren en la medida en que entendemos que somos constructores de tiempo y este, a su vez se despliega y pliega en la medida en que nos movemos por el mundo.
El sustento conceptual de la obra se deriva de la lectura de “Nueva refutación del tiempo” en donde Borges nos permite entender el tiempo como un aspecto de la vida humana que adquiere diferentes formas y nos toca a todos de múltiples maneras. No se puede definir bajo un término y tampoco se puede delimitar a una línea de sucesos.
El tiempo en este texto es también un tiempo poético, precisamente, porque la poesía permite desdoblar la palabra misma a otros significados y a otras formas de experiencia.
Lo Cito:
“El tiempo es la sustancia de que estoy hecho.
El tiempo es un río que me arrebata, pero yo soy el río;
es un tigre que me destroza, pero yo soy el tigre;
es un fuego que me consume, pero yo soy el fuego"
´Remember to remember', ¿qué significa en su obra?
Es una frase que gracias a la repetición (en español: Acuérdate de Acordarte) nos deja entender la memoria como un proceso de actualización de archivos inscritos en el cuerpo.
¿Por qué tantas alusiones a Jorge Luis Borges? ¿Por qué le gusta tanto?
Borges es el gran maestro del tiempo en literatura. Me ha permitido pasar de maneras diversas por la experiencia de la escritura, justamente como un acto en el que producimos temporalidades y abrimos espacios para ver el mundo desde la propia.
Línea de vida ¿por qué 4000 botellas? ¿cómo nació esta obra?
El número de botellas corresponde a una medida espacial también.
Línea de vida surge en una residencia artística en Galápagos (Ecuador) en donde me encontré con una serie de procesos ambientales en los que negociaciones vitales están en curso y en el que el humano no tiene otra salida sino negociar con la naturaleza, pero sobre todo con el mar.
¿Qué significa el Premio del Museo la Tertulia?
El premio es una gran oportunidad para indagar sobre el cuerpo en Cali y simultáneamente abrir el espacio del museo a otros discursos más allá de los de las artes visuales y plásticas.
¿En qué consiste este premio?
La propuesta que presenté se titula “¿Cómo habitar este espacio ahora?”. Desde la pregunta pretendo hacer del espacio del museo un lugar de experimentación social y de cruce. Un espacio abierto al diálogo y al intercambio de conocimiento con otras instituciones relevantes en la ciudad de Cali.
Me interesa indagar sobre el cuerpo y el espacio público, sobre la relación del cuerpo y la institución, del cuerpo y lo colectivo; sobre la manera como desde el concepto de diversidad podemos también pensar el discurso de género y relacionarlo con la naturaleza para finalmente pensar la relación del cuerpo y el futuro.
Creo que esta propuesta nos servirá a todos para abordar el cuerpo como eje primordial de la experiencia diaria y entender su valor como entidad promotora de conocimiento con miras a afrontar de maneras menos convencionales las problemáticas políticas, ambientales y sociales del nuestro país.
¿Para qué el performance en Colombia?
Creo que la pregunta más pertinente seria: ¿para qué hablar del cuerpo en Colombia?
El cuerpo es y ha sido el blanco del conflicto social y político en Colombia y es desde el cuerpo que podemos también encontrar formas experimentales y menos convencionales para formular posibles acciones en contra de la fragmentación y la violencia. Creo profundamente que es el cuerpo el que abrirá los discursos tradicionales a espacios más fértiles de discusión, redefinición y consenso. Creo que es solo a través del cuerpo que lograremos hacer resistencia al estado actual de intolerancia y miedo.
El cuerpo como herramienta y como generador de conocimiento.
Para eso es el cuerpo, para afirmar la vida a través de diversas avenidas, sin buscar unificar o aplanar la multiplicidad a la que nos debemos y a la cual debemos defender.
Creo que es solo desde el cuerpo, en todas sus posibles manifestaciones, que en Colombia podemos pensar que somos capaces de rehacernos desde otras formulaciones que comprenden el conflicto pero que nos posibilitan pensarnos después del mismo.
