Popayán: un joven perdió la vida en medio de la grave situación de orden público de este viernes
Ante la grave situación de orden público que se registró en Popayán, través de su cuenta de Twitter, la ONU lamentó la muerte violenta de Sebastián Quintero Munera, de 22 años, hace pocas horas durante las protestas que se realizan en la ciudad, que iniciaron en rechazo de la presunta violación de una menor de edad por parte de policías.
“Hacemos un llamado a la calma y a respetar la vida y los #DerechosHumanos de todas las personas”, expresó la ONU.
Según las denuncias de organizaciones de derechos humanos, en medio de enfrentamientos entre los manifestantes y la Fuerza Pública en el barrio La Esmeralda, un gas lacrimógeno lanzado por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) impactó en el cuello del joven, ocasionando su muerte inmediata.
La protesta fue convocada en rechazo del presunto caso de una joven de 17 años que, al parecer, se quitó la vida luego de denunciar que fue abusada sexualmente por cuatro policías que la retuvieron en medio de las manifestaciones. La institución ha negado los hechos.
Las manifestaciones iniciaron en a las afueras del comando de Policía en Popayán. Y en medio de estas fue incinerado parcialmente las instalaciones de la Fiscalía, ubicada al sur de la ciudad. También fue destruida las instalaciones de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) donde presuntamente fue violentada la joven.
En horas de la tarde fue tumbado el monumento a Francisco de Paula Santander, ubicado en inmediaciones de la Terminal de Transportes, y el monumento ‘Edificadores de paz’, que rendía homenaje a la Policía. Aunque las autoridades no han confirmado el balance general de las protestas den Popayán, organizaciones de derechos humanos hablan de alrededor de 40 heridos.
Las manifestaciones continúan pese a que la Alcaldía de Popayán declaró toque de queda y ley seca desde las 6:00 p.m. hasta las 5:00 a.m. del sábado 15 de mayo.
