Emprendedoras sorprenden en Tumaco con el sabor del Pacífico nariñense
Emprender a partir de la gastronomía es la mejor fórmula con la que cuentan las mujeres afrodescendientes del municipio de Tumaco para encantar a los paladares más exigentes de Colombia con los más deliciosos sabores de la cocina ancestral que identifican a la costa pacífica nariñense.
A esta prodigiosa tierra donde la comida se disfruta al son de increíbles canciones como las que en su tiempo fueron interpretadas por Leonidas Garcés popularmente conocido como ‘Caballito Garcés’, arriban visitantes de las ciudades de Cali, Bogotá y Medellín entre otras importantes ciudades del país.
De esta magnífica experiencia gastronómica hace parte Justina Ortiz, una joven de 18 años de edad que aprendió de su madre Manuela Valencia a sembrar y a transformar la yuca y el plátano que se cultivan en la vereda Candelillas.
La primera cosecha del tubérculo fue bondadosa y por eso asegura que jamás olvidará aquel 2023 en el que los más de 50 kilos de yuca que obtuvo, le permitieron solventar parte de sus necesidades básicas y desde luego preparar el tradicional bollo limpio o relleno.
Este sencillo pero delicioso producto se consume a cualquier hora del día con una buena taza de café o chocolate. Su preparación inicia tras moler la yuca y posteriormente mezclarla con pimienta, harina y huevos.
Cuando la masa ha alcanzado su máxima consistencia, Justina pone entre las palmas de sus manos una bolita de la mezcla, que posteriormente ubica en una tabla de madera y la aplasta con un tuvo plástico que sirve como rodillo.
Dos minutos después que la mezcla ha reposado, pone sobre ella una cucharada de guiso que entre otros ingredientes contiene chillangua y chirarán, 2 tradicionales plantas muy utilizadas en las familias de ‘La Perla del Pacífico’ para acentuar el sabor de la comida.
Antes de cerrar y sellar los filos de la masa le pone un trozo de queso costeño o según el gusto de los clientes, la rellena con dulce de guayaba. Muy bien sabe que el bollo limpio a diferencia del bollo relleno lo único que lleva es una pisca de sal.
Sus productos los comercializa informalmente en las avenidas La Playa y Férrea y de la totalidad bollos que prepara, a la semana vende entre 120 y 160 unidades.
Irresistibles sabores del mar
Karen Cortés es otra emprendedora que en los platos ancestrales encontró la manera de luchar contra el desempleo. Una de sus especialidades son los camarones encocados.
Este producto con el que se identifica en las ferias gastronómicas lo prepara desde hace más de 10 años y reveló que la leche de coco y el aceite achiotado hacen parte del secreto de su sabor.
Para conservar el sabor de los alimentos tropicales, sugiere que es indispensable poner a freír en una sartén a fuego medio; cebolla y ajo. Posteriormente indica que se agrega pimentón, ají, tomate y cilantro cimarrón.
Después de cocinarlos por 10 minutos, Karen aconseja condimentar con sal, comino y pimienta. Estos moluscos se acompañan con una porción de arroz, patacón y ensalada de aguacate.
Ruby Góngora impresiona a propios y visitantes con la infaltable cazuela de mariscos, el tradicional pescado frito y el acostumbrado sancocho de pescado. Estos antiquísimos platos que se disfrutan en el Pacífico sur se preparan con camarón, pulpo, bagre y pargo rojo, entre otros; se combinan con hierbas y especias que las cocineras tradicionales cultivan en las azoteas.
Alexandra Olmedo a quien le encantan las bebidas naturales, orientó su emprendimiento hacia los jugos elaborados con frutas tropicales. Una de las preparaciones con las que sobresale en las playas de El Morro es la tradicional limonada con agua de coco.
De igual manera, impone su tradicional coctel de frutas, el cual lleva una espesa capa de almíbar que se combina con pedazos de manzana, banano, papaya y piña. Estos apetecidos productos los suele comercializar en El Morro y en otros lugares de Tumaco.
