Las historias de las chivas colombianas se reúnen en un libro
Por: Alejandra Restrepo.
Carlos Pineda es fotógrafo y diseñador manizaleño, hace más de 15 años empezó a recorrer el país inmortalizando los paisajes llaneros, las historias, los rostros y diseños de la estética popular.
Una de las costumbres que retrata son los buses de escalera que desde el siglo pasado vemos en las carreteras de las regiones de Colombia.
En Radio Nacional de Colombia presentamos su nuevo libro “Chivas, arcoíris del camino” un hermoso recorrido por la historia, los autores y los secretos de estos buses.
“La idea del libro es un pretexto por revalorar nuestro arte popular, por llevar al público esa realidad tan vital que es la cultura popular, un pretexto también para evitar que la chiva quede reducida a un objeto exótico que proporciona una escenografía para despertar la curiosidad de los turistas” dijo Pineda en conversación con La Señal de la Mañana.
El fotógrafo se adentró en las carreteras colombianas, esas que sólo subido en una chiva se pueden conocer, descubriendo la otra Colombia que muestra una expresión cultural arraigada pero desconocida.
“Quise dar a conocer este universo y sus detalles para valorar algo tan autóctono como la chiva que es muy importante para la construcción del país, alguien decía que si la mula conquistó las montañas, la chiva las colonizó” recordó Carlos Pineda.
En su investigación, Carlos descubrió que desde 1908, unos empresarios intentaron empezar con el transporte parecido a la chiva que no funcionaron, más adelante en 1923, en El Carmen de Viboral los hermanos Montoya compraron un camión StudeBaker y lo empezaron a transformar, la decoración comienza a crearse en los años 50 en Medellín con la familia Pabón en Itagüí (Antioquia)
Con respecto a las regiones donde aún se mueven las chivas en nuestro país, Carlos cuenta:
“En toda Colombia hay chivas. Hay 3 regiones básicas donde se mueven estos buses: Nariño, Cauca y Putumayo, se decoran con esténcil y aerógrafo, muy similares a las antioqueñas y caldenses, pero también en Huila y Caquetá hay algunas corporativas. En Caldas y en Antioquia la mayoría de chivas se decoran muy coloridas, solamente usando compás, regla y pincel, esta técnica las hace maravillosas porque es un trabajo a mano, que suben estos buses a un status de arte rodante y efímero, porque los propietarios cambian sus colores cada 5 o 6 años” añade Pineda.
“Este libro vale la pena tenerlo, muestra algo que a pesar de ser muy cotidiano para nosotros, a veces resulta muy desconocido, lo pueden adquirir en librerías de Bogotá y Caldas y en la página www.carlospineda.co” dijo el fotógrafo.
Escuche aquí la entrevista con Carlos Pineda en Radio Nacional de Colombia:
