Comunidad afro “tumbó” al Soldado Micolta, personaje de Tv
Luego de interponer un derecho de petición ante el Canal Caracol, la organización Chao Racismo logró que el personaje conocido como el "Soldado Micolta", del programa de humor Sábados Felices, saliera definitivamente del aire.
Según la solicitud, la existencia de un personaje que prolonga el estereotipo negativo y burlesco del ser afro, "se constituye en la semilla para la generación de comportamientos segregadores, racistas o discriminadores, debido a que ningún afro o negro se sentía representado en este personaje, y no porque cause molestia a los afrodescendientes o negros; sino, porque estos estereotipos reafirmados causan falta de oportunidades laborales, bajo acceso a salud, o educación”.
La noticia fue dada a conocer por Ray Charrupi, director de Chao Racismo, en el marco del Segundo Congreso Internacional de Mercadeo y Publicidad Incluyente, que se llevó a cabo esta semana en Bogotá. Expertos que asistieron al evento concordaron que Colombia “debe iniciar un proceso desde la academia y la sociedad que replantee su forma de hacer humor, apelando a la creatividad y frenando los chistes homofóbicos, racistas y regionalistas negativos”.
Humorista Roberto Lozano quién interpreta a el 'Soldado Micolta'.
El personaje en cuestión es un exponente de una polémica tradición conocida como "Blackface", práctica que surgió en los Estados Unidos alrededor de 1848, en la que actores blancos subían al escenario con los rostros pintados de negros. Esta suerte de encarnación ha desatado históricamente discrepancias debido a la reafirmación de estereotipos negativos de la población, tanto en el contenido de los chistes como en la caracterización del personaje.
Para expertos y activistas de la población afrocolombiana, Colombia se acostumbró a burlarse de las condiciones diferentes del otro desde el humor y, con ello, se perpetúan acciones concretas en lo real que se orientan generalmente a manifestaciones de racismo, xenofobia y discriminación.
Afirman los líderes afro que “el hecho de que veamos este tipo de humor todos los días no quiere decir que en efecto sea positivo para un país que está en vilo de un acuerdo de paz”. Esa firma empieza, como diría la investigadora y antropóloga Ana María Arango, en "la celebración de la diferencia, no en la burla hacia esta. Y esa celebración se hace desde el individuo y el colectivo en las regiones y en lo local".
