“El propósito del medio público siempre será generar contenidos que hagan reflexionar”: Fernando Subirats
A propósito del primer Foro Internacional de Medios Públicos - FIMPU 2019, realizado el pasado 30 de octubre en Bogotá, hablamos con Fernando Subirats, director ejecutivo de Radio Nacional de Argentina, sobre cuál es la importancia de los medios de comunicación estatales y cuáles son los pilares básicos para generar impacto con calidad en las audiencias.
¿Por qué el esfuerzo de trabajo de la radio pública es mayor que la del medio privado?
Porque en un medio privado te puedo poner cualquier barbaridad con el fin de capturar la audiencia, y no por mal, porque así se trabaja en ese sector. Eso es algo en lo cual el medio público nunca puede caer, nuestra responsabilidad con las audiencias es altísima. El propósito del medio público siempre será generar contenidos que hagan reflexionar a las personas, ese esfuerzo es mayor al de producir contenido que se quede con ‘la primicia noticiosa’.
¿Cuál es el diferencial en la forma como se generan los contenidos de regiones de Radio Nacional de Argentina?
Trabajamos motivando a nuestros periodistas regionales con el fin de que produzcan contenidos para todo el país, emitidos directamente desde la central en Bueno Aires. Si son buenos y de calidad, esos contenidos son emitidos desde la frecuencia principal para todo el país. Este ejercicio no es fácil, no es algo que hayamos logrado de un día para otro.
¿Cuáles son las diferencias más significativas entre los medios públicos y los comerciales?
Trabajé gran parte de mi vida en emisoras privadas y algo que sin duda logré identificar es que las comerciales siguen un interés, y la mayoría de las veces ese interés no se critica si está bien o está mal, finamente son un negocio, tienen que generar plata porque de lo contrario no subsisten. Ahora, el Estado responde a otras dinámicas de servicio.
El único requisito que se le pide al medio estatal es que esté donde tiene que estar, porque finalmente los está bancando la gente, toda la población, entonces las autoridades tienen la obligación de llegar a todos los territorios.
¿Cómo generar confianza en las audiencias, cuando muchas veces la población asocia los medios públicos con el Gobierno?
Ese trabajo no tiene solo que ver con las autoridades, insisto en que los trabajadores tienen gran parte de responsabilidad en lo que hacen, porque aparte el medio también es de ellos, en el medio público no hay un dueño. Eso permite que los mismos periodistas desarrollen un sentido de pertenencia.
Por otra parte, los medios públicos deben conservar la calidad en sus contenidos con el fin de desarrollar credibilidad en las personas, sin generar caos donde no lo hay. Eso es algo que en su mayoría hacen los medios privados con el fin de llamar a las audiencias.
¿Qué destacaría sobre el financiamiento de los medios públicos en perspectiva de América Latina?
Hay más presupuesto en los medios públicos que en los medios privados, hay más gente trabajando en los públicos que en los privados. Lo digo con conocimiento de causa por mi experiencia en ambos sectores. Lo que habría que ver es dónde está ese presupuesto y en qué se invierte, si se usa generando más contenidos o contratando más personal, eso algo que se ve reflejado en las dinámicas que tiene cada medio.
¿Qué cosa no puede faltar en la relación que establece el medio público con sus audiencias?
Algo que pasa frecuentemente es que los medios públicos no somos federales, recién ahora lo estamos empezando a implementar. Durante mucho tiempo fuimos centralistas, sobre todo en el caso de Argentina y creo que ahora tenemos que ser más localistas que nunca y ayudar desde la centralidad a compartir los contenidos que desde las regiones se está produciendo.
¿Qué experticia crea este Primer Foro Internacional de Medios Públicos – FIMPU 2019?
Esta experiencia marca un precedente para el continente. Me alegro muchísimo de que Colombia sea el país en dar el primer paso, porque en realidad este encuentro se estuvo debatiendo tiempo atrás pero no se había desarrollado. Colombia tuvo la valentía de abrir sus puertas para que todos los medios públicos de Latinoamérica nos hiciéramos una autocrítica delante de un montón de gente. Eso es de admirar.
