Incertidumbre en la comunidad de Calarcá, Quindío por cierre de relleno sanitario
Por Andrea Cardona. Radio Nacional de Colombia Manizales.
La comunidad de las veredas Buenos Aires Bajo, El Crucero Chagualá y Palogrande en el Quindío están a la espera de saber qué pasará con la basura depositada en el relleno sanitario Villa Karina de Calarcá, después del cierre definitivo que ordenó la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ).
La entidad emitió un comunicado donde señala que en segunda instancia se ratificó la resolución 3085 del 19 de noviembre de 2017 que sanciona con una multa por 489 millones de pesos y el cierre del relleno que es operado por la Empresa Multipropósito de Calarcá operadora del proyecto.
El comunicado indica textualmente que “la contaminación a corrientes hídricas por el inadecuado manejo de los lixiviados que circulan y se mezclan con las aguas lluvias, escurriendo sobre las canaletas hasta la quebrada El Crucero, afluente del río Quindío e incumplimiento a la licencia ambiental”
La comunidad espera que con este cierre se apliquen las medidas necesarias para garantizar que la basura que está en la ladera no genere una tragedia.
Lucelly Velasco integrante del movimiento Veredas Unidas, indicó que por años han sufrido las consecuencias de convivir con malos olores, lixiviados, moscos y roedores. Ahora queda la incertidumbre de saber qué pasará con la basura depositada
“Llevamos muchos años en esta lucha. En el 2003 líderes de la empresa llegaron a la comunidad y convencieron a los habitantes que apoyaran el proyecto. Prometieron transporte escolar para los estudiantes, trabajo formal para los vecinos y la pavimentación de la vía, pero no cumplieron”, señaló Lucelly.
Las fuentes de agua son la mayor preocupación para el director de la Fundación Ecológica Cosmos de Calarcá, Néstor Ocampo. Explicó que los lixiviados del relleno contaminaron la Quebrada el Crucero que finalmente desemboca en el río La Vieja que surte al municipio de Cartago en el Valle del Cauca. Además que la empresa incumplió con la recuperación ambiental y paisajística del relleno.
“El relleno siempre fue un basurero que incluso recibió desechos de Manizales, Pereira y Cartago. La empresa prometió recuperar la zona y construir un parque ambiental y convertirlo en un atractivo turístico para resarcir los efectos de operación de 12 años. Ahora tiene que cumplir con esto que está incluido en la licencia ambiental”, afirmó Néstor Ocampo.
Para el líder ambiental el cierre es el resultado de la resistencia y la lucha durante más de 14 años de las comunidades campesinas. Ahora espera que la empresa detenga el escape de lixiviados, indemnice a la comunidad y retirar el exceso de basura que excedió la capacidad del relleno.
Por el momento los depósitos de basura se están llevando al relleno sanitario Andalucía, en Montenegro (Quindío), ubicado a 17 kilómetros al occidente vía Alcalá.
