20 años sin Bonifacio Bautista
Nacido en Pamplona, Norte de Santander, en noviembre de 1908 y fallecido en Cali en noviembre de 1999, el compositor José Bonifacio Bautista Gélvez compuso más de 300 temas en clave andina colombiana, destacándose en facetas alegres y festivas como las del pasillo vivo y el bambuco fiestero.
Hoy, el repertorio de ‘Boni’ Bautista sigue siendo de obligatorio proceder entre músicos dedicados a las manifestaciones del interior, especialmente dentro del rubro de las bandas de vientos.
En su libro ‘Cultores de la música colombiana’, el investigador José I. Pinilla lo recordó como “hombre inteligente y de gran talento para la música, dedicado a ella desde su niñez, cuando comenzó a librar la batalla para alcanzar su meta de ser reconocido nacionalmente entre quienes hacían derroche de armonías”.
Y es que, desde su juventud en su natal Pamplona, Bonifacio Bautista Gélvez se destacó por su precoz dominio de casi todos los instrumentos de la banda de la población, gracias a lo cual pudo dirigir alrededor de 40 agrupaciones en este formato en Bogotá, Antioquia, Caldas, Huila y el Valle del Cauca.
Fue, además, docente del Conservatorio de Bucaramanga, solista de la Banda Departamental de Santander y fundador de coros y estudiantinas, en un continuo trasegar por todo el país que le valió el apodo de ‘El Gitano de la Música’.
Bautista inició su aprendizaje musical en su Pamplona natal con Gerardo Rangel, padre de la dinastía a la que pertenecieron los legendarios Oriol y Otón Rangel. Dentro de sus composiciones destacadas se encuentran ‘Gente alegre’, ‘Arreboles’, ‘Retorno’, ‘Tardes de España’, ‘Espíritu huilense’, ‘Mi patria chica’, ‘Susanita’ y ‘Ecos de Santander’, escritas en clave de danza, marcha, pasodoble, bambuco y pasillo.
El 1° de noviembre conmemoramos 20 años de la partida del compositor Bonifacio ‘Boni’ Bautista. Por eso es nuestro Artista de la Semana.
