Buscan prohibir uso de glifosato en cultivos de uso ilícito y actividad agrícola
Mediante un proyecto de ley, los senadores Antonio Sanguino, de Alianza Verde, y Guillermo García Realpe, del Partido Liberal, buscan prohibir el uso del glifosato para combatir los cultivos de uso ilícito y para el uso en la actividad agraria. Insisten en que el herbicida es una alternativa costosa y poco eficiente para la lucha antinarcóticos.
El senador Sanguino, al recordar que la Corte Constitucional recientemente dejó en manos del Consejo Nacional de Estupefacientes la decisión de retomar la aspersión aérea con este químico, bajo el cumplimiento de los condicionamientos de la sentencia T-236, advirtió que “las fumigaciones con glifosato no resuelven el problema de los cultivos ilícitos en Colombia, es una alternativa costosa y es una solución ineficiente”.
Y señaló que por esta razón se ha planteado este proyecto de ley, “la prohibición del uso del glifosato en las fumigaciones de los cultivos de uso ilícito y una transición, por diez años, para ir sustituyendo progresivamente el uso del glifosato en otras actividades agrícolas en Colombia”.
Por su parte, el senador García Realpe indicó que son más las afectaciones que trae el glifosato que los beneficios que proporciona en la lucha contra los cultivos de uso ilícito.
“El glifosato genera una afectación grave a la salud y al medio ambiente, pero también a los cultivos de pancoger, plátano o cacao, que se pierden por las fumigaciones con este químico”, afirmó el congresista oriundo de Nariño, una de las regiones con mayores extensiones de cultivos de uso ilícito en el país.
García también advirtió que su departamento ha sido uno en los que mayormente se ha utilizado el glifosato para atacar los cultivos de uso ilícito y, sin embargo, en lugar de disminuir las hectáreas cultivadas, aumentaron debido a que los campesinos, al no tener otra alternativa, recurren a la resiembra.
Los congresistas señalaron que varias de las demandas falladas en Estados Unidos y otras partes del mundo en contra de los laboratorios que producen el glifosato han sido por afectaciones a personas en usos agrícolas legales, lo que corrobora que también debe ser prohibido el uso de este químico para este sector.
