El aumento del salario mínimo vital en Colombia ubica al país entre los cinco primeros de Latinoamérica
El presidente de la República, Gustavo Petro, confirmó que a partir de enero de 2026 el salario mínimo vital en Colombia será de 1.860.000 pesos, al que se sumará un auxilio de transporte de 140.000 pesos, alcanzando un total mensual de 2.000.000 de pesos.
Esta cifra representa un incremento del 54 % frente al salario mínimo vigente en 2025, que sumaba 1.295.000 pesos, entre salario base y auxilio de transporte.
Con este aumento, Colombia se sitúa como uno de los países latinoamericanos con los salarios mínimos más competitivos. Comparando cifras aproximadas convertidas a pesos colombianos, Chile registra 1.150.000 pesos, México 980.000 pesos, Brasil 1.250.000 pesos, Perú 1.070.000 pesos, Ecuador 1.020.000 pesos y Uruguay 1.350.000 pesos.
En tanto, países con economías más robustas como España y Alemania registran salarios equivalentes a 7.000.000 y 8.500.000 pesos mensuales, respectivamente, sin que sus economías estén en quiebra, como algunos opositores han sugerido en Colombia.
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El Gobierno nacional sostiene que esta medida busca garantizar una vida digna a los trabajadores y sus familias, y al mismo tiempo fortalecer la economía interna mediante el aumento del poder adquisitivo y el consumo. Además, se destaca como un instrumento de justicia social que protege los derechos económicos y sociales y contribuye a reducir la desigualdad.
“Subir el salario mínimo no pone en riesgo la estabilidad económica del país, sino que beneficia a millones de ciudadanos, fomenta el crecimiento del mercado interno y respalda la sostenibilidad del empleo formal”, afirmó el presidente Petro en el anuncio oficial.
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Con este incremento, Colombia supera a varios países vecinos en términos de salario mínimo y se acerca a niveles más competitivos dentro de la región, demostrando que un aumento significativo puede coexistir con una economía estable y en crecimiento. El Gobierno también enfatizó que el ajuste contará con medidas de seguimiento para garantizar que el beneficio llegue efectivamente a los trabajadores y sus familias.