La Alcaldía de Cali decretó el toque de queda y la ley seca de 1:00 a.m. a 5:00. a.m. desde hoy hasta el próximo 16 de diciembre. La medida busca detener el aumento en el número de contagios y muertes por Covid-19, tras el incremento en la ocupación de camas de cuidados intensivos.
Jorge Iván Ospina, alcalde de la ciudad, precisó que también se busca que las personas comprendan “que no deben ir a sitios de aglomeración, que no debe ir toda la familia a las áreas comerciales, que es imprescindible el uso del tapabocas, el lavado de manos y el distanciamiento físico”.
Además, indicó que la medida va unida a zonas y espacios bioseguros, a microterritorios y atención en barrios y a medidas para desbloquear las unidades de cuidados intensivos. Según el último informe del Ministerio de Salud, en el Valle del Cauca se reportaron 37 muertes por Covid-19, 19 de ellas en Cali.
Miyerlandi Torres, secretaria de Salud de la ciudad afirmó que también se tomaron medidas en el sector salud: “Aplazar todas las cirugías y procedimientos que no sean urgentes, aplazar cirugías estéticas y realizar el desescalonamiento de la tercera a la mediana y a la baja complejidad. Debemos tener en cuenta que en clínicas y hospitales las zonas de expansión de UCI fueron ocupadas por otras patologías o se cerraron y el compromiso con los centros médicos fue volver a ampliar estas salas y habilitarlas.”
Según la funcionaria, la administración está preocupada por lo que pueda pasar después del 20 de diciembre: “¿Qué puede pasar? Que empecemos un segundo pico que no podamos controlar, que puede ser mucho más alto que el primero y es lo que se ha visto en otros países”, señaló.
La Alcaldía también anunció que se realizará nuevamente un cordón sanitario en al menos ocho cuadras del centro de Cali, para regular la entrada y salida de comerciantes y clientes a los que se les tomará la temperatura y se les exigirá que cumplan con los protocolos de bioseguridad.