Carrozas agrícolas: insignias del Festival de la Cosecha en Granada, Meta
Los granos de maíz, de café y cacao, los cítricos y el plátano, son algunos de los productos del campo que protagonizan año a año el desfile de carrozas agrícolas que se realiza en Granada, Meta en el marco del Festival de la Cosecha llanera celebrado durante este fin de semana.
En esta edición, 29 carrozas recorrieron la capital del Ariari a pesar de la lluvia, con figuras gigantescas de animales y frutas características de la vida en el campo y algunos propios de la región del Ariari como la sandía, la piña y el chigüiro.
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Fueron 35 juntas de acción comunal las que conformaron la Corporación de Carroceros Agrícolas del Ariari, quienes le dan vida a este desfile que desde el 2019 con la resolución 2291, logró que fuese incluida como Patrimonio Cultural Inmaterial del Departamento del Meta, pero hoy estos artesanos y agricultores trabajan para que las carrozas agrícolas de Granada sean Patrimonio Inmaterial de la Nación.
Esta festividad se celebra hace 60 años aproximadamente, aunque hace apenas 28 se convirtió en festival. Sin embargo, entre campesinas y campesinos existe gran preocupación por la carestía en los insumos del agro, por las lluvias, inundaciones y el cambio climático como causantes de la perdida de muchos cultivos. Esto genera que el oficio de construir las carrozas sea más difícil, razón por la que, para prepararlas, aunque en su mayoría los frutos son de sus propios cultivos, debieron comprar productos como la patilla, la piña, el mango entre otros que no tenían en sus fincas.
Una vez termina desfile, la comunidad empieza a pensar en el del próximo año, así lo narra Carlos Bonilla, presidente de la Junta de Acción comunal de la vereda Guanayas o Trocha 11. “Nosotros, por ejemplo, terminamos esta y ya nos estamos preparando para el otro año, aquí no se fija por competencia, es para mostrar qué es lo que nosotros producimos y en qué estamos implementando la agricultura y que los productos tengan un valor agregado”.
Por su parte, Jenny Castro, gestora cultural quien desde hace cinco años trabaja con campesinos de la zona rural por el reconocimiento de la producción agrícola, la tradición familiar y el relevo generacional, describe a la muestra de carroceros como un agradecimiento a la bonanza de la tierra, por esto, en cada desfile utilizan los mejores frutos.
“La actividad inicia cuando se prepara la tierra para poder sembrar el producto, se espera la cosecha y por esto se celebra en agosto y se recogen los productos, pero el trabajo fuerte se da en los últimos días”, explicó Castro.
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Meses antes se reúne toda la comunidad, definen la temática y durante la cosecha escogen los mejores frutos, pero el viernes previo al desfile, se empiezan a tejer el faldón con una base de maíz y el sábado, el día anterior al desfile, entre 20 y 30 personas por carroza, se reúnen a organizar, limpiar y tejer los frutos escogidos con alambre y varilla.
Son frutos frescos de colores vivos que durante esta preparación sueltan sus aromas cítricos en una jornada larga, que aunque llegue la noche, continúa hasta terminar el último detalle.
