¿Por qué tus buñuelos no quedan redondos? Este es el secreto que cambia toda la receta
Los buñuelos son uno de los sabores más emblemáticos de la Navidad en Colombia. Su aroma, su textura crujiente por fuera y suave por dentro, y su presencia indispensable en las reuniones familiares convierten esta preparación en un símbolo de celebración. En esta guía, te damos todos los pasos, recomendaciones y proporciones para lograr unos buñuelos tradicionales, fieles a la receta artesanal que ha pasado de generación en generación.
¿Cuáles son los ingredientes esenciales?
Para obtener buñuelos de calidad es fundamental usar insumos frescos y de buena procedencia. La receta clásica incluye:
1 taza de harina de maíz refinada (no precocida)
1 taza de almidón de yuca
250 g de queso costeño o queso fresco rallado
1 huevo
½ taza de leche (aproximadamente, según consistencia)
1 cucharadita de azúcar
1 pizca de sal
Aceite suficiente para freír
Estas cantidades permiten lograr una masa equilibrada, firme pero suave, ideal para que los buñuelos queden esponjosos y no se abran durante la fritura.
¿Cómo se prepara la masa?
El primer paso consiste en mezclar los ingredientes secos en un recipiente amplio: la harina de maíz, el almidón de yuca, el azúcar y la sal. Una vez integrados, se añade el queso rallado y se mezcla con las manos para obtener una textura homogénea.
Luego, se incorpora el huevo y se agrega la leche poco a poco, hasta lograr una masa suave que no se pegue en las manos. Es importante no humedecer en exceso la mezcla, pues esto puede afectar la forma final del buñuelo.
Uno de los aspectos determinantes del éxito de la receta es la temperatura del aceite. Para evitar que se revienten, el aceite no debe estar ni muy frío ni demasiado caliente. Una técnica tradicional consiste en introducir una pequeña bolita de masa: si sube lentamente a la superficie, el aceite está en el punto exacto.
Los buñuelos deben freírse a fuego medio y sin sobrecargar la olla, lo que garantiza una cocción pareja y un color dorado uniforme.
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¿Cómo lograr que queden redondos y esponjosos?
La forma perfecta se obtiene con bolitas de tamaño similar, moldeadas sin apretar en exceso. Durante la fritura, los buñuelos deben girar solos; este movimiento es señal de que están cocinándose correctamente por dentro.
El tiempo aproximado de fritura es de 6 a 8 minutos. Una vez dorados, deben dejarse escurrir en papel absorbente para retirar el exceso de grasa.
Los buñuelos son protagonistas de las novenas, desayunos y celebraciones familiares. Tradicionalmente se acompañan con natilla, chocolate caliente o café, aunque también pueden servirse solos como parte de una mesa navideña.