Pasar al contenido principal
CERRAR

Música femenina en pie de lucha

Tres poderosas cantantes que han desarrollado su carrera musical en ambientes particularmente hostiles. 
Fotos: Tomadas de Facebook.
Juan Carlos Garay

El Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer nos trae la oportunidad de visibilizar (y escuchar, por supuesto) a tres poderosas cantantes que han desarrollado su carrera musical en ambientes particularmente hostiles. 

Gracias al fenómeno de la “world music” (música del mundo), podemos conectarnos con expresiones artísticas de culturas muy lejanas. En estos casos, el sentido de la música va en la misma vía que lo expresado por la Organización de las Naciones Unidas al denunciar en esta fecha “todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino”. La expresividad femenina sobresale aún en circunstancias adversas. Estos álbumes de mujeres de Marruecos, Malí e Irán son ejemplo de originalidad sonora y resistencia.

Marruecos: Bab L’Bluz – Nayda

Le debemos la publicación de estas canciones a un sello disquero inglés, ya que quizá en su natal Marruecos esta banda se habría tardado mucho en despegar. El título, ‘Nayda’, significa “Despertar” y es el término con que se ha nombrado a la escena musical alternativa que utiliza lenguaje de la calle y canta sobre temas controvertidos. Al frente de esta propuesta está la vocalista Yousra Mansour, quien ha tenido que luchar por su estatus en una sociedad en que incluso la contracultura está dominada por figuras masculinas. ¿Y el sonido? La base son los instrumentos tradicionales marroquíes (el laúd, en particular, está muy bien grabado) pero se cuelan constantemente elementos de rock, rap y reggae. Aún cuando no entendemos el idioma, trasciende su carácter intrépido.

Malí: Oumu Sangaré – Acoustic 

El primer disco de Oumu Sangaré en los años 90 fue la chispa que inició una revolución feminista en su nación. Hoy es una auténtica diva de la cancion de Malí (y de todo el noroccidente africano) y se da el lujo de experimentar con distintos sonidos en cada grabación. Así por ejemplo ‘Mogoya’, de 2017, tenía un sonido discotequero. A pesar del éxito obtenido, la cantante pareció no quedar contenta con el resultado y decidió regrabar esas canciones en un formato más sencillo y natural. En eso consiste ‘Acoustic’: es un regreso a la raíz, donde la fuerza no está en los recursos electrónicos sino en los instrumentos autóctonos, la voz potente de Sangaré y los dulces coros femeninos que le responden. Este disco es el más recomendable para empezar a escuchar a esta artista.

Irán: Mahsa Vahdat – Enlighten the Night 

Una de las consecuencias de la revolución islamista de Irán es la prohibición a las mujeres de cantar en público. Por esta razón, Mahsa Vahdat ha tenido que grabar y promover la mayoría de su obra por fuera de su país. Además su cercanía con la organización Freemuse, que aboga por la libertad de expresión para los músicos del mundo, la ha obligado a exiliarse. Este es su álbum más reciente, grabado en Noruega pero sin perder su norte, que es la evolución de una tradición musical persa. De hecho, el grupo de músicos que la acompaña tiene el formato de un trío de jazz, pero claramente su sonido es oriental. Estas canciones tienen un componente poético y la voz de Mahsa parece tranquila, contemplativa, pero detrás hay una espíritu inquieto y una inspiradora tenacidad. 
 

Artículos Player

ETIQUETAS