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‘200 de cilantro’, el sabor de la música andina en Santander

El trío ‘200 de cilantro’ presenta su primer cosecha, ‘Otro granito de arena’, un disco que celebra la pasión de la música andina colombiana.

Por: Ruth Gélvez de Radio Nacional Santander.

El trío instrumental ‘200 de Cilantro’ cumplió nueve años haciendo música, tiempo que ha valido para sembrar conocimiento, disciplina y sobretodo, pasión por la música andina en tierras santandereanas.

La cosecha de la agrupación sangileña, se refleja en la sonrisa del público y su algarabía, mientras de fondo se escuchan la guitarra, el tiple y el piano.

Su primer disco, que nació a pedido del tiempo, sus maestros y gestores culturales de la región, refleja la madurez de sus jóvenes intérpretes.

“La gente nos pedía un disco, incluso nos decía que estábamos demorados. Pero yo creo que estos nueve años de carrera nos han permitido tener un sonido, un lenguaje y nos han llevado a conocer mucho más el repertorio de la zona andina colombiana”, comentó Carlos Vásquez Soto, integrante de la agrupación.

Carlos Vásquez Soto, tiple y guitarra. Foto: Ruth Gélvez.

‘Otro granito de arena’ es el título del disco, surge de un bambuco de León Cardona, el maestro que hace unas décadas revolucionó la música andina colombiana.

Vásquez comentó que la experiencia de grabar este disco con otros músicos conocidos fue grandiosa.

“Contamos con cuatro músicos estupendos, uno de ellos muy distinguido a nivel de Latinoamérica y el mundo, Manuel Rojas, flautista del Ensamble Gurrufío. Un grupo que yo considero es la marca de Venezuela, con él grabamos un merengue venezolano y es una composición mía, entonces la hicimos a dúo de flauta y guitarra”.

Jonathan Reyes, músico organista. Foto: Dirección de Cultura de San Gil.

El disco también cuenta con la compañía de tres sangileños. Jonathan Reyes, quien desde muy niño se apasionó por el órgano electico y de quien varios músicos y críticos afirman podría ser el sucesor del gran maestro Jaime Llano González.

Juan Pablo Cediel, de trayectoria internacional, que acompaño al grupo en el bajo eléctrico. “Él es pianista, guitarrista y bajista, en los escenarios no se deja ver, pero cuando coge la guitarra en las tertulias es impresionante” confesó Carlos.

Diego Otero, tiplista. Foto: Ruth Gélvez.

Y finalmente José Chepe Noriega, eminencia de la guitarra en Santander y en Colombia.

“Mi instrumento principal es el tiple, fue un amor a primera vista y la guitarra ha sido el instrumento que me ha tocado asumir por el rol en el trío. Sin embargo me gusta, todos los años que uno ve los homenajes en Colombia, cierta manera espera llegar a ese punto, porque siempre ha sido nuestra labor, dejar en alto el nombre de San Gil”, expresó Carlos Vásquez, al recordad sus inicios en la agrupación.

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