Los hechos ocurrieron en la Calle 210 con carrera séptima, en uno de los lotes contiguos a los cementerios del norte de Bogotá. En la información conocida por las autoridades, se confirma que el aterrizaje fue forzado y tan solo a 20 minutos después del despegue. La aeronave es pequeña, pertenece a una academia de aviación y tiene la matrícula HK 1598G.
Los tripulantes, que eran profesor y alumno, están ilesos, pues fue un aterrizaje controlado. En el lugar se encuentra la policía nacional y los bomberos de la estación Caobos, así como el helicóptero Halcón de la policía, con el fin de verificar la situación.
Dicha aeronave es de la Escuela Adevia y las fuentes aseguran que el piloto se llama Édgar Gustavo Hernández, quién como ya se reseñó, no presentó lesiones.
Otra información detalla que el aterrizaje forzado se produjo a los 20 minutos después del despegue.
La Aeronáutica Civil de Colombia ha informado que los investigadores de la entidad se desplazan al lugar, para establecer las causas del accidente.