Sector comercial rechaza nuevas restricciones en Bogotá para contener el Covid-19

Los gremios comerciales han mostrado su rechazo a las nuevas restricciones decretadas en Bogotá para contener el aumento de casos de Covid-19. En diálogo con Señal de la Mañana, de Radio Nacional de Colombia, Juan Esteban Orrego, director ejecutivo de Fenalco Bogotá y Cundinamarca, y David Contreras, presidente encargado de Asobares Colombia, manifestaron su preocupación y propuestas.

Para estos gremios, el pico y cédula y toque de queda nocturno es una medida restrictiva que, sumado a la cuarentena estricta, podría provocar una grave afectación en el comercio formal, un sector que se ha visto seriamente perjudicado a lo largo de la emergencia sanitaria.

“La cuarentena y el pico y cédula son dos medidas extremadamente fuertes, que terminan generando una afectación importante para el comercio, porque no solo se va a dejar de facturar durante los días de cierre, sino que los días en los que se va a abrir tendríamos únicamente el 50 por ciento de la asistencia de la población”, señaló Orrego.

Indicó que esta disposición lo único que provoca es desplazar el consumo hacia la informalidad, desconociendo que el comercio formal continúa asumiendo los gastos de nómina, arriendo y servicios. Incluso, detalló que algunos establecimientos comerciales han tenido que cerrar porque no alcanzan a cubrir la totalidad de los costos.

Así mismo, el director manifestó que desde que se permitió la reapertura gradual de los sectores económicos, el comercio formal ha cumplido con la totalidad de los protocolos de bioseguridad y ha garantizado la protección para las personas que asisten a estos lugares.

“El comercio formal ha sido muy estricto con el cumplimiento de las medidas de bioseguridad, inclusive se ha hecho todo tipo de actividad pedagógica, buscando que la gente sea consciente en los exteriores también de la importancia del autocuidado”, comentó el representante de Fenalco.

Orrego agregó que, aparte del pico y cédula, limitar las restricciones para los fines de semana podría concentrar el impacto económico en unos sectores en particular que operan y tienen mayor demanda en estos días.

“Es importante alternar los días de los cierres, que no sea únicamente durante los fines de semana, sino también dentro de la semana, de tal forma que la afectación no sea solo para algunos sectores”, expresó.

A propósito, Contreras aseguró que cualquier restricción que limite la actividad económica durante los fines de semana y específicamente en la noche no será bien recibida por el gremio de Asobares.

“Nosotros tenemos tres días intensos que son jueves, viernes y sábado, logramos rescatar los dos primeros días en un diálogo con la alcaldesa, argumentando que la noche no siempre debe recibir todo el peso de las medidas. Hay que entender que no solo se trata de sacrificar un fin de semana, sino que a lo largo de la pandemia se han sacrificado 50 fines de semana, más de un año sin poder operar. Entonces le comentamos que la economía nocturna no puede seguir siendo la cenicienta del paseo”, apuntó Contreras.

Dijo que no existe ningún estudio científico que demuestre que en los establecimientos comerciales se propaga con mayor velocidad y eficacia el virus.

“Los grandes contagios los pone el descontrol en el día, las aglomeraciones en muchas actividades diurnas y la clandestinidad de fiestas en hogares y fincas, pero terminamos pagando los platos rotos la economía formal que somos los que cumplimos los protocolos de bioseguridad”, concluyó.