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Avalancha en Quibdó cobró la vida de una niña de cinco años

La creciente del río Munguidó, afectó por lo menos a cuatro comunidades en la capital del Chocó.

Esta mañana se conoció por parte de la Alcaldía Municipal de Quibdó que, el pasado domingo 9 de agosto, se registró un crecimiento repentino en los niveles del río Mojaudó, afluente del río Munguidó, en jurisdicción de la comunidad de San Pedro Claver, perteneciente al municipio de Quibdó. La creciente que afectó al menos a cuatro comunidades, cobró la vida de una menor de cinco años de edad, quien fuese arrastrada por la corriente del río.

Las fuertes lluvias presentes en la zona, que ya completan dos semanas, también afectaron un gran número de cultivos de pancoger, animales de corral y un número aún sin determinar de viviendas.

A la zona se desplazó una comisión encabezada por el alcalde municipal, Martín Sánchez, además de Ilson Mosquera, coordinador municipal de la oficina de Gestión y Atención de Riesgos y Desastres, quienes arribaron con ayudas de primera necesidad y un equipo de socorristas para adelantar las labores de análisis de daños y estudio de necesidades.

Se calcula de forma preliminar, por parte de las autoridades locales, que cerca de 100 familias serían las afectadas con las inundaciones provocadas por el desprendimiento de laderas del río y la posterior avalancha.

La madre de la niña, aún con lesiones en el cuerpo, se encuentra estable. Y varias familias solicitan la reubicación de sus viviendas, para que no se vuelvan a presentar casos similares, ya que en estos momentos se encuentran alojados en albergues temporales y casas de familia ubicadas en la parte alta del corregimiento.

Se conoció también que en los municipios de Bahía Solano y Río Sucio, las fuertes lluvias mantienen afectaciones en estas zonas del Chocó

El IDEAM mantiene alerta naranja sobre las fuentes hidrográficas de la región debido a la temporada de lluvias, al tiempo que advierte de los deslizamientos de tierra producidos por las fuertes precipitaciones hídricas.

Por su parte, Rafael Bolaños, coordinador departamental de Gestión y Atención De Riesgos y Desastres, reiteró el llamado a estar alerta a los cambios en los niveles de los ríos y a extremar cuidados en adultos mayores, población infantil y personas con limitaciones físicas.

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