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En Medellín, un piano 'colgado' en la montaña

En su interior, un instituto de arte, música y danza.

En la vía Las Palmas en Medellín, se divisa desde lejos un piano 12 veces más grande que uno normal, empotrado en la montaña y adornando el paisaje de la vía al aeropuerto. En su interior salones de música, arte, danza y lectura llenan el cuerpo del piano y bajo su tapa, una sala de conciertos espera a los asistentes de “Musicreando”, una institución que lleva más de 30 años formando jóvenes en música, danza clásica y todas las artes.

“Musicreando” es una organización familiar que nació alrededor de un piano que sonaba cada noche en medio de la sala de una familia de 11 hijos, la de Piedad Rivera y Antonio Zuluaga.

Foto: Musicreando

Empezó como una guardería y finalmente se convirtió en instituto de artes, pero duraron muchos años en casas prestadas, o de aquí para allá y cuando se dieron cuenta de que necesitaban un lugar propio, se les ocurrió que esta nueva casa debía ser en forma de piano, aquí interviene el arquitecto Mario Quiceno, quien ayudó con las proporciones y la obra de ingeniería, que se convirtió en reto, para finalmente obtener un piano gigante que de día brilla y de noche alumbra.

Alrededor del piano hay un edificio en forma de castillo, una sala para clases de piano, siete salones para clases de instrumento y técnica vocal; así como una sala de ensayo para las bandas de latin jazz, pop y rock, un salón-museo de arte y un estudio de grabación.

Foto: Musicreando

En diálogo con Radio Nacional de Colombia, Clara Zuluaga, directora de “Musicreando”, explicó que el instituto en forma de piano se creó por iniciativa de uno de los 11 hermanos de la familia Zuluaga, que en su interior hay salones para estudiar música, Hip Hop, Ballet y otras artes.

Es un lote de 4000 metros preparado por y para el arte, que se ve bajando por Las Palmas como si estuviera colgado en la montaña.

Foto: Musicreando

Su arquitecto, Mario Quiceno, dijo que la obra se hizo con mucho cariño, tomando las proporciones de uno de los pianos que hay en casa de uno de los hermanos. Para realizar esta obra, no tocaron la montaña y levantaron muy alto las patas del piano, “eso fue lo que dio esa imagen del piano colgado en la montaña”, añadió.

Escuche a continuación la historia completa de esta ingeniosa obra en la entrevista a Clara Zuluaga, directora de “Musicreando", en #LaSeñalDeLaMañana:

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