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Historia de un joven talento momposino

Anderson Silgado Peña, de 17 años de edad, nos recibió y compartió sus talentos. Éste, es su relato.

Caminábamos por la calle ‘La Albarrada’ del municipio Santacruz de Mompox, en el centro del departamento de Bolívar. Ya habíamos visitado la iglesia San Francisco, la de San Agustín, y nos aproximábamos a la Iglesia de Santa Bárbara, una de las más importantes de la ciudad; cuando escuchamos en la distancia, un piano.

Por aquellos días se vivía en la ciudad el VI Festival de Jazz de Mompox, por tanto, era muy común encontrarse con artistas de lo que se conoce popularmente como el Street Jazz, que no es más que jóvenes talentosos, mayormente con trompetas, cajas y saxofones; mostrando sus talentos y habilidades musicales. Pero escuchar un piano, nos llenó de asombro. Parecía que alguien ensayaba y repetía insistentemente una melodía que en principio no logramos reconocer.

Nos aproximamos respetuosamente a una enorme casa colonial, ubicada a pocos metros de la Iglesia. La puerta estaba entre abierta, pero aun así tomamos el aldabón, como reza el cuento popular, “dos o tres golpes", y en seguida salió él. Conversamos, nos invitó a pasar y nos sirvió un jugo de corozo. Se trataba del profesor Jesús Alberto Abuabara Martínez, sin saberlo habíamos llegado a la Fundación Artística y Cultural Santa María de Mompox. El sonido que nos había llevado hasta allí, era de uno de los muchos jóvenes talentos momposinos. Anderson Silgado Peña, de 17 años de edad, nos recibió y compartió sus talentos. Éste, es su relato.

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