En crisis económica se encuentran los comerciantes del Puente Aéreo de Bogotá

Por: Sebastián Osorio Idárraga

Hace un año y dos meses que Avianca trasladó todas sus operaciones hacia el Aeropuerto Internacional El Dorado. Desde entonces, son muchas las empresas y comerciantes independientes que han tomado la decisión de irse del Puente Aéreo, pues las ventas ya no cubren los gastos de sus negocios.

Luego de 35 años de operación en el Puente Aéreo, el pasado 29 de abril de 2018, Avianca centró su operación en la terminal aérea 1 de Bogotá; es decir, el Aeropuerto Internacional El Dorado. Allí, trasladó 16 destinos y llegó con una oferta de 240 vuelos diarios. El cambio estuvo argumentado, principalmente, por la efectividad y reducción de tiempos en conexiones y desembarques.

En el 2018, 69,3 millones de pasajeros se movilizaron vía aérea en el país, siendo el aeropuerto El Dorado 1 y 2 la terminal aérea que más pasajeros movilizó, con una participación del 47 por ciento.

Mientras Avianca, al centralizar sus operaciones nacionales e internacionales en la terminal 1 desde 2018, movilizó en promedio más de 15 millones de pasajeros, Easy Fly y Satena, las aerolíneas que ahora están en el Puente Aéreo, solo cubrieron una oferta de entre un millón y medio y dos millones de pasajeros.

“Aparte de que se baja mucho el número de pasajeros, el tipo de pasajero que queda no es el comprador. Hay pérdidas. Yo que manejo la administración sé los costos y las variables económicas, se está perdiendo. Con la esperanza de que se recupere hacia el futuro si vienen más aerolíneas”, dijo Hugo Humberto Alfonso, comerciante del Puente Aéreo.

Al visitar la terminal 2, como la llaman en el sector aéreo, hicimos un conteo de los locales, vitrinas y burbujas comerciales que hay en este lugar y a las que el público tiene acceso antes de abordar. De acuerdo a su distribución, son entre 45 y 50 locales, de los cuales 18 están cerrados y tienen logotipos de OPAÍN -empresa administradora del aeropuerto- invitando a otros empresarios a invertir allí.

Una de las comerciantes del Puente Aéreo, quien pidió reservar su identidad, aseguró que el arriendo de su local supera los 10 millones de pesos y que sus ventas se han reducido un 80 por ciento en el último año, llevándola a recortar su personal de seis a tres personas.

“Reducir gastos, e hicimos un préstamo para pagar arriendo, para tratar de sostenernos un poco más de tiempo. (...) Se pasaron cartas y se habló con abogados pero eso no dio resultado. OPAÍN lo único que nos dice es que no saben qué va a pasar y que si no se puede pagar el arriendo, nos podemos ir”, expresó la propietaria.

Sin embargo, no todos viven la misma situación y algunos argumentaron que su administración ha hecho que el negocio se mantenga con un buen nivel de ingresos, aún cuando en el Puente Aéreo hacen presencia almacenes y restaurantes de cadena.

Aunque Easyfly y Satena, que operan desde el 30 de abril en esta terminal aérea, no tienen una responsabilidad directa con lo que sucede en los locales comerciales del Puente Aéreo, sus planes de expansión sí tienen un impacto en ellos.

Easyfly opera 10 destinos desde Bogotá y ha aumentado la oferta descentralizada de vuelos en el país a 38 rutas. La ruta más reciente es Bogotá-Barrancabermeja.

Isaac Herrera, director de producto y venta de esta aerolínea, dijo que la operación de más rutas incrementa el flujo de pasajeros y para todas las ciudades “la cadena de turismo por cada turista que llegue a la región, pues genera una cadena de valor que permite generar empleos hacia otros sectores”.

Ante dicha situación económica y la visible disminución de oferta y demanda en el Puente Aéreo, Radio Nacional de Colombia buscó y trasladó a OPAÍN las inquietudes de los comerciantes; sin embargo, la empresa administradora de esta terminal aérea aseguró no querer pronunciarse ni comprometerse en este momento con el tema.

Escuche aquí el informe completo sobre la situación económica de los comerciantes del Puente Aéreo de Bogotá: