Desde el pasado 1 de julio, ocho jóvenes de La Guajira adelantan una huelga de hambre como forma de protesta por las condiciones que históricamente han sido desfavorables para el departamento.
“Hoy, en pleno siglo XXI, cientos de niños tienen que caminar kilómetros y kilómetros para llegar a sus escuelas y recibir clases en enramadas bajo el inclemente sol; en la salud, tenemos hospitales destruidos, situación que ha causado la muerte de muchas personas que pudieron salvarse; decenas de niños han muerto por desnutrición. Esta generación debe levantarse”, señaló Luis Lobo, uno de los jóvenes manifestantes.
La plaza del parque Simón Bolívar en Riohacha fue el lugar que escogieron los estudiantes para realizar la protesta que busca, a través de un pliego de peticiones, que el Gobierno Nacional realice un plan que garantice el derecho fundamental de los guajiros, quienes durante muchos años han vivido problemas de hambre, desnutrición de niños y niñas, falta de agua potable y poco acceso a la educación.
Además, los jóvenes exigen mayores oportunidades para la población indígena y afrodescendiente del departamento, quienes, según ellos, históricamente han sufrido la desidia y la corrupción de los gobiernos de turno.
“Estamos en huelga de hambre intentando solucionar estas problemáticas, buscando que el Gobierno Nacional lleve a cabo un gran plan articulado que involucre a todos los componentes de desarrollo humano y que permita salvaguardar la vida de los guajiros”, puntualizó Lobo.
La huelga de hambre se dio en el marco del cumpleaños número 56 de La Guajira, día en que también la Sección Quinta del Consejo de Estado anuló la elección de Nemesio Roys Garzón como gobernador de este departamento por doble militancia.
Los jóvenes consideraron esta fecha propicia para demostrar que, a pesar de estos 56 años, “La Guajira sigue presentando serios problemas de corrupción y desigualdad”, afirman.
Hasta el momento, los manifestantes no han recibido respuesta alguna por parte del Gobierno Nacional, e indicaron que no desistirán de la huelga de hambre hasta ser escuchados.