En Bogotá y Cundinamarca se registraron hechos de vandalismo y disturbios
En Bogotá se presentó una jornada de protestas mayoritariamente pacífica en distintos puntos de la ciudad. Sin embargo, en horas de la tarde y la noche de este lunes, las autoridades reportaron hechos vandálicos y disturbios entre Fuerza Pública y manifestaciones en el sur de la capital.
Para el caso del sector de Yomasa y del Puente de la Dignidad, en la localidad de Usme, se registraron ataques en contra de vehículos del sistema masivo de transporte, donde por más de 20 minutos varios manifestantes detuvieron seis buses del SITP, amenazando con armas cortopunzantes a los conductores y a los pasajeros.
Transmilenio reportó que los vehículos fueron recuperados por parte de las autoridades, pero igualmente hizo un llamado asegurando que “los conductores habrían sido obligados a subir hasta la zona donde se presentaba la concentración”.
Respecto a los casos de civiles heridos, aún se desconoce la cifra de cuántas personas resultaron afectadas en medio de esta jornada de manifestaciones. Sin embargo, las autoridades reportaron que al menos 15 uniformados de la Policía Nacional resultaron heridos o lesionados en medio de los hechos.
Por otro lado, en Cundinamarca se registraron varios disturbios, especialmente en el municipio de Madrid, donde los manifestantes incendiaron una estación de Policía, donde se encontraban los uniformados de turno e integrantes de la Fuerza Disponible.
“Rechazamos las graves agresiones por parte de un grupo de personas contra la estación del barrio El Sosiego, a la cual ingresaron y le prendieron fuego. Delicados hechos en donde se ha visto afectada toda la comunidad del sector, presentándose además daños en las casas y comercios vecinos. Hay varios policías heridos y los manifestantes han agredido a la misión médica que intenta prestar atención, impidiendo su paso”, reportó la Gobernación de Cundinamarca por medio de un comunicado oficial.
De forma similar, se registraron hechos de vandalismo en el municipio de Facatativá (Cundinamarca), donde por tercera vez fue atacado el Palacio de Justicia con piedras y con material inflamable, lo que provocó un incendio en este lugar, a pesar de la reacción inmediata de las autoridades correspondientes.
