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Petrona Martínez pone los nuevos ‘beats’ de la música colombiana

El folclor y la electrónica son la fórmula de la ‘Reina del bullerengue’ para extender sus raíces de la música tradicional. Su primera presentación en vivo ya fue todo un éxito.
Miguel Ángel Cortés

El goce de la gaita, la tonada bailable del tambor llamador y el canto de una matrona de la música colombiana. Esta es la mejor definición cuando Petrona Martínez pisa un escenario. Hace gala de sus sonidos ancestrales, aquellos que en su más reciente disco, mezcla con gamas electrónicas. Sin embargo reitera: sus raíces siguen firmes e intactas.

Desde San Cayetano (Bolívar), la llamada ‘Reina del bullerengue’ proviene de una estirpe de cantadoras del Caribe. Un digno linaje con origen en su bisabuela Carmen Silva, preservado por su abuela Orfelina Martínez y su tía Tomasita Martínez. Esto sumado a la labor de compositor de su padre Cayetano Martínez. Fue así como Petrona heredó más allá del honor afrocolombiano, la pasión por las letras y los ritmos tradicionales, los mismos que hoy son sinónimo de su nombre.

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Foto: Miguel Ángel Cortés

“La música folclórica es mi vida, mi amor. Yo nací dentro de la música folclórica y ahí moriré”, afirma sin titubeos esta cantadora.

Su última novedad discográfica, denominada ‘Petrónica’ reúne 16 de sus temas más reconocidos y los fusiona con arreglos de música electrónica. La idea surgió luego de explorar en redes y plataformas digitales, encontrando gran cantidad de versiones y propuestas de canciones de Petrona mezcladas por diferentes djs con estos sonidos modernos.

“Hay muchos jóvenes que han cogido mis canciones para interpretarlas de forma electrónica. Y si las hacen otros, ¿Por qué yo no, si soy la dueña?”, se pregunta.

Foto: Miguel Ángel Cortés

Con iniciativa del productor Manuel García Orozco y la mánager Maite Montero, se socializó y se llevó a cabo esta propuesta con la participación de artistas de géneros no tradicionales como Aterciopelados, Palenke Soultribe, Doctor Krápula, Pernet, Sidestepper, Xenia Ghali, La Bermúdez, entre otros.

Como resultado, se logró un compilado musical en tributo a la ‘Reina del bullerengue’ a dúo con estas figuras, en versiones libres creadas por cada artista. Una amalgama de puro folclor colombiano con matices electrónicos.

“Es una manera de que otro tipo de público, al que no tiene que gustarle las músicas tradicionales, conozcan la música de Petrona. Hay un álbum hecho para ella, que es la columna vertebral. El sonido ancestral es su voz, los tambores que pasan por procesadores y demás, como lo trabajan los djs”, afirma la gaitera Maite Montero, mánager de Petrona.

Foto: Miguel Ángel Cortés

Los comentarios y el recibimiento del disco fueron positivos entre diferentes públicos dentro y fuera de Colombia. Sin embargo, el verdadero reto llegó tiempo después: llevar ‘Petrónica’ a un escenario en vivo, desde luego con la participación de su protagonista. La propuesta fue de los organizadores de la 5ª versión del Mompox Jazz Festival, para ser parte del evento con esta producción. Sin embargo, todo se preparó, los músicos, las mezclas y los arreglos.

Foto: Miguel Ángel Cortés

“Todo un beat”, así resumió la misma Petrona lo que fue la primera presentación en público de este trabajo. La algarabía y el baile se tomaron la Plaza Santa Bárbara de ‘La Tierra de Dios’ con un público que disfrutó al mejor estilo de una fiesta electrónica con los sonidos autóctonos del Caribe.

Esta artista veterana del folclor confiesa que antes no creía mucho en esta producción, la consideraba de poco interés. Pero el balance de esta primera muestra en vivo le dejó otra impresión. Vio al público muy entusiasmado, que le gusta la electrónica y “por algo será”.

Foto: Miguel Ángel Cortés

“Yo decía: - Ahorita que termine esto no hago más na’, yo voy a seguir en lo mío (…) Pero me han dado ganas de seguir las dos versiones. El trabajo con ‘Petrónica’ es para mí ahora como estrenarme un vestido nuevo. Al comienzo me siento rara, pero después le voy cogiendo el gustico”, comenta entre risas.

Ya son 78 años de edad y más de 30 de carrera. Son tantas canciones, conciertos y diversas latitudes donde ha concurrido para ser embajadora y máxima exponente de la música tradicional colombiana. Con una sonrisa dice que lo sigue haciendo “con mucho orgullo y sabrosura”. 

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