Fue capturado y judicializado Fabián Andrés Cuestas Beltrán, subintendente de la Policía Nacional y exjefe de turno del esquema de seguridad de la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez.
De acuerdo con la Fiscalía, Cuestas estaría involucrado en una red criminal que se dedicaba al tráfico ilegal de armas, municiones y accesorios que desviaba desde la Dirección de Protección y Servicios Especiales (Dipro).
Al parecer, utilizaba vehículos oficiales destinados para asegurar a altos funcionarios, donde transportaba el material bélico. Se trata de un caso de corrupción en la Policía, que denominó “Operación Ares”, donde estaban involucrados otros uniformados, activos y retirados, así como altos mandos policiales.
”Estas personas se habrían articulado para extraer armas y cartuchos de diferentes calibres de las instalaciones oficiales y comercializarlos; modificar pistolas, revólveres y rifles, o alterar los registros del armamento y la munición que les confiaban particulares”, aseguró la Fiscalía.
En enero del 2025, Cuestas fue sorprendido en un retén policial en Guasca, Cundinamarca, donde contaba con munición de la que no pudo justificar su procedencia.
Debido a esto, se interceptaron llamadas donde el subintendente intentó contactar oficiales y un general para que se frenara el procedimiento. Así mismo, se revelaron entregas de armamento en vehículos oficiales y traslados que llegaron hasta negocios de Bogotá.
El subintendente Cuestas y los presuntos cómplices no aceptaron los cargos que les imputó la Fiscalía por concierto para delinquir, tráfico de armas y uso indebido de las insignias.
Según señala W Radio, la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez aseguró que no conocía sobre las actividades ilegales que pudo haber hecho su exescolta.