Estados Unidos confirma ataques letales en el Pacífico oriental y crecen denuncias por posibles ejecuciones extrajudiciales
El Departamento de Defensa de Estados Unidos aseguró que las lanchas atacadas estaban supuestamente vinculadas al narcotráfico. Sin embargo, hasta el momento no ha presentado pruebas públicas que respalden esa versión, lo que ha generado cuestionamientos desde distintos sectores políticos y organismos internacionales.
Alertas de la ONU y la CIDH
De acuerdo con el Comando Sur, los ataques fueron ordenados por el secretario de Guerra, Pete Hegseth, en el marco de la operación denominada Southern Spear. No obstante, organismos como la Organización de las Naciones Unidas y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han advertido sobre posibles ejecuciones extrajudiciales y eventuales violaciones al derecho internacional humanitario, al tratarse de acciones militares con saldo letal en aguas internacionales.
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Reacciones de Colombia y Venezuela
Tanto Venezuela como Colombia alertaron sobre una peligrosa escalada militar en la región y señalaron que este tipo de operaciones incrementa el riesgo para la seguridad regional y la vida de civiles que transitan por estas rutas marítimas.
Tensión política en Estados Unidos
Las acciones militares se producen, además, en medio de un desacuerdo interno en Estados Unidos. La Cámara de Representantes aprobó un proyecto bipartidista que busca recortar parte del presupuesto del Departamento de Defensa hasta que el Pentágono entregue toda la documentación técnica, operativa y audiovisual relacionada con las operaciones ejecutadas en el Caribe y el Pacífico. La iniciativa ya fue enviada al Senado para su discusión.
En ese mismo contexto, el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, anunció que se realizará una sesión informativa obligatoria con los secretarios Pete Hegseth y Marco Rubio, luego de semanas de presión política. Schumer afirmó que estas acciones deben ser explicadas ante el Congreso y calificó las operaciones como imprudentes y carentes de supervisión, al tiempo que sostuvo que el pueblo estadounidense merece control y rendición de cuentas.
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Incautación de petrolero y personas desaparecidas
A este escenario se suma la incautación de un buque petrolero con crudo venezolano por parte de Estados Unidos. El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela acusó a Trinidad y Tobago de colaborar en lo que calificó como el “robo” de la embarcación, incautada la semana pasada en medio de las maniobras militares de Washington en el Caribe.
Sobre la tripulación del buque, las autoridades venezolanas reportan al menos 26 personas desaparecidas, aunque algunas estimaciones elevan la cifra hasta 35. Hasta ahora no existe información clara sobre su paradero ni garantías jurídicas sobre su situación.
Mientras aumentan las operaciones militares en alta mar, también se intensifica el llamado de la comunidad internacional a proteger la vida humana, respetar el derecho internacional y garantizar justicia y transparencia en el desarrollo de este tipo de acciones.