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‘El Fervor’, el documental que rinde tributo a Juan Gustavo Cobo Borda

La pieza audiovisual, dirigida por Santiago Martínez, narra, además de la importancia del legado del poeta, ensayista y crítico literario bogotano, facetas más personales y familiares de Cobo Borda.
Yaneth Jiménez Mayorga

Con la lectura de un fragmento de ‘Salón de Té’, uno de los libros de poemas de Juan Gustavo Cobo Borda, inicia ‘El Fervor. Un homenaje a Cobo Borda’, el documental de casi 20 minutos que el próximo 21 de marzo estrena la Biblioteca Luis Ángel Arango en el marco del Día Mundial de la Poesía. 

En la pieza audiovisual, dirigida por Santiago Martínez Caicedo, el investigador y poeta Ramón Cote busca mostrar el legado del poeta Juan Gustavo Cobo Borda desde la revisión de sus obras, la lectura de algunos de sus poemas y conversaciones con personajes cercanos como su hija Paloma Cobo, Ernesto Samper Pizano, Carmen Barvo, y José Luis Díaz-Granados, quienes narran anécdotas que compartieron junto a uno de los más fervientes admiradores de la obra de Jorge Luis Borges.


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Hablamos con Santiago Martínez Caicedo, director del documental: 

¿Cómo se empieza a gestar el documental? 

A mediados del año pasado, la Biblioteca Nacional rendía un homenaje a Juan Gustavo por su trayectoria e impacto en la vida cultural del país con la exposición ‘La Fiesta de la palabra’, un homenaje al que la Biblioteca Luis Ángel Arango se quiso unir, con la realización del documental. Así empezamos el proceso. 

¿Cómo definieron qué querían contar en un corto documental de una vida tan prolija como la de Cobo Borda? 

Fui muy interesante porque tuvimos la asesoría del reconocido poeta colombiano Ramón Cote, conocedor de primera mano de la obra de Juan Gustavo, con quien definimos cuatro aspectos importantes de abordar: sus facetas como editor, poeta, asesor cultural de proyectos importantes como la creación del Ministerio de Cultura, y las de amigo y padre. 

En el proceso de rodaje y de conocer a los personajes con los que fuimos conversando, nos dimos cuenta que queríamos darle mucha más fuerza a estas dos últimas facetas, que creo son las que menos reconoce el público, y que tuvieron un impacto muy fuerte en las personas cercanas a él. Ese lado de la persona cálida, cariñosa, que amó con mucha fuerza a su familia, a sus hijas.  

Y dentro de esa dimensión plasmar también su alegría… 

Algo un poco triste de nuestro documental es que no logramos contar con la presencia de Juan Gustavo en vida. Sin embargo, en el material de archivo que nos cedió la Biblioteca Nacional, en el que se nota que a pesar de que su salud estaba frágil, su alegría seguía viva y contagiaba a todo el mundo. Las personas que se ven a su alrededor en las fotografías siempre están con una carcajada.

¿Por qué el nombre de ‘El fervor’ para el documental? 

El nombre nos llegó un día en una de las conversaciones que tuvimos con Carmen Barvo, hablando de la faceta como editor. Era una palabra que habíamos discutido con Ramón Cote antes, porque sentimos que, de una forma muy sutil y sigilosa, Juan Gustavo terminó teniendo un impacto enorme sobre la cultura colombiana, pero fue algo que sentimos que ocurrió lentamente, como entra en ebullición el agua, de a poquitos y de repente. El fervor viene como de ese sigilo con el cual él trabajó y con el que impactó contundentemente. 

¿Qué vamos a ver, a descubrir en el documental? 

Vamos a encontrar una descripción de la vida de él como poeta y editor en la que participan José Luis Diaz-Granados y Carmen Barvo; una faceta muy conmovedora, que es la de amigo, de la que habla Ernesto Samper; otra en la que Juan Gustavo lee parte de su obra, otra en la que exalta su amor por Bogotá, por su familia, por los libros, por la cultura, por la literatura. 

Escenarios donde la biblioteca personal de Cobo Borda es protagonista… 

Para cualquier persona que ame los libros, las letras, poder adentrarse en la biblioteca de Juan Gustavo es un refugio del conocimiento. Estar allí es obnubilarse ante una colección tan impresionante. Por ello, escogimos que varias de las entrevistas ocurrieran ahí porque es donde están sus primeras obras, las colecciones que editó, su colección de libros de Borges, entre otros tesoros. Estar allí nos hizo sentir arropados por los espíritus y todas esas voces que siempre le hablaron a Cobo, que siempre lo acompañaron, y que sentimos que también nos acompañaron a nosotros.

¿Qué diferencia este documental de otros homenajes a Cobo Borda? 

Lo más valioso, el poder mostrar y resaltar esa faceta personal. Estoy muy agradecido con la participación cercana que tuvimos de Paloma Cobo, una de sus hijas, que nos abrió su casa y nos contó detalles muy íntimos de su relación con su papá. Creo que a diferencia de otros homenajes donde se concentran mucho en el amor de Juan Gustavo por la palabra, aquí hay un enfoque en esa faceta amorosa.    

¿A ti como director qué te deja la realización del documental? 

Es muy extraño porque me siento muy cercano a Juan Gustavo, a su esposa, a su familia. Ellos también fueron muy amplios, nos permitieron acercarnos de una forma muy íntima a su casa, a su archivo fotográfico, pero más allá del conocimiento de su obra, me deja esa calidez de un bello hogar.  

El documental se podrá ver en el canal de YouTube del Banrepcultural, desde el 21 de marzo. 

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