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45 años sin Gildardo Montoya

Intérprete también del tiple y la guitarra Montoya es recordado por su tema "El gitano groserón", clara parodia al cantaor Juan Legido.
Radio Nacional de Colombia

No hay duda alguna de que la breve pero fundamental labor del antioqueño Gildardo Montoya Ortiz en el mundo de la música colombiana es un pequeño tesoro de alegría y sabor, una promesa truncada que tenía todo para dar hasta aquel 25 de noviembre de 1976, día en que se accidentó en su moto en Medellín.

En su libro “La música parrandera paisa”, el médico Alberto Burgos Herrera dice lo siguiente respecto de esta figura de nuestra música: “Este cantante, músico y sobre todo compositor, ya prácticamente entró en la leyenda, pues además de hacer nuestra más cercana música bailable, antioqueña y guitarrera, también hacía composiciones para combos, para orquestas, y tal vez ha sido de los únicos paisas muchas veces interpretado por los cantantes y acordeoneros vallenatos”.

Nacido en el corregimiento de Palermo, municipio de Támesis, Antioquia, en febrero de 1939 y fallecido trágicamente a sus 36 años en Medellín en 1976, Montoya fue uno de los más talentosos compositores e ingeniosos exponentes de la llamada parranda antioqueña, género de letras picarescas de inmensa popularidad en tierras de Antioquia y el Gran Caldas.

Montoya inició su vida laboral como recolector de café en Fredonia y luego se fue a buscar suerte a Medellín, donde trabajó como vendedor en la plaza de mercado del barrio Aranjuez. Allí empezó a enamorarse de la música mexicana, en especial del talento compositivo de José Alfredo Jiménez. Un día se ganó un acordeón en una rifa, y allí empezó a probar su talento innato.

Sus primeros pinos los hizo en concursos de emisoras locales como Radio Visión y Radio Sinfonía. Y luego empezó a grabar cumbias que hoy son muy buscadas entre los coleccionistas, para sellos como RCU –de propiedad de Rodrigo Cardona Urán–, Ondina y Clarín. Luego empieza a familiarizarse con la música de José Muñoz, los hermanos Bedoya y otros exponentes de la parranda paisa, hasta convertirse en su exponente más recordado y creativo.

Intérprete también del tiple y la guitarra Montoya es recordado por su tema "El gitano groserón", clara parodia al cantaor Juan Legido, conocido como "El gitano señorón". Como cantante de música parrandera, lo suyo fueron las canciones de corte cómico tales como "El arruinao", "Como yo soy tan raro", "El trovador del Valle" y "Dele por ái". Curiosamente muchos de esos temas aparecieron en los discos, por voluntad propia, atribuidos a otros autores. La razón: Gildardo Montoya sentía que su verdadera obra era la que escribía para las grandes orquestas tropicales antioqueñas, y no aquellos requiebros picarescos que se hacían cada vez más exitosos.

Más allá de su labor en el mundo de la música parrandera como solista, Gildardo Montoya escribió clásicos tropicales interpretados, entre otros, por Los Graduados, Nelson Henríquez y Los Hispanos, para quienes empezó a crear a partir de 1972, cuando es nombrado director artístico del sello Codiscos. Entre todas esas composiciones sobresalieron "La pelea del siglo", “El aguardientoski”, “Piel de luna”, "María Puñales" y, sobre todo, la inmortal “Plegaria Vallenata”, que fue cantada por Alejo Durán y por el Combo de las Estrellas; único vallenato antioqueño en ser incluido en la lista de 100 años de vallenato de Pilar Tafur y Daniel Samper Pizano. También fue cantante del Grupo Venezuela, combo con el que popularizó una versión en cumbia de la clásica balada rock “La chica de la boutique”.

Tristemente, su vida terminó pronto, en 1976, tras ser chocado por un carro en un cruce de calles del barrio medellinense de Belén, mientras se movilizaba en una moto que le había comprado al cantante Jairo Paternina.

El 25 de noviembre se conmemoran 45 años del fallecimiento prematuro del inolvidable Gildardo Montoya, compositor, productor y pionero de la música parrandera. Por eso, es nuestro Artista de la Semana.

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