Javier Darío Restrepo y su legado al periodismo colombiano

Por: Alejandro Romero

Quienes conocieron a Javier Darío Restrepo coinciden en que se trató de una de las mentes más brillantes del país. Un hombre respetuoso, dedicado y certero a la hora de emitir sus conceptos, siempre en busca del beneficio de la sociedad, a quien el periodismo colombiano vio partir este domingo 6 de octubre.

María Teresa Herrán, una de sus colegas más cercanas, señaló que “murió el amigo incondicional, el guía, el faro, el humanista, el escultor de las palabras, el filósofo, el abuelo sencillo, el pensador, el ser humano integral”.

Para Restrepo, durante su vida, el periodismo siempre fue uno de sus ejes temáticos lo que le permitió afirmar que en la actualidad esta profesión “está en crisis” y así mismo señalar que “es la oportunidad para reinventarnos, cosa no nos damos cuenta porque los periodistas somos poco autocríticos”.

Pedro Vaca, director de la Fundación para la Libertad de Prensa, refirmó en su mensaje de despedida para Javier Darío Restrepo, la importante pérdida que sufre el gremio de los periodistas. Dijo el directivo: “obró hasta el último día de su vida como faro del periodismo. En un país donde la prensa muchas veces desprecia la rigurosidad, él reflexionaba sobre la ética”.

La ética era su tema predilecto, frente a esto Restrepo siempre señaló que “es la vocación que tiene todo ser humano de ser excelente y si se quiere ser excelente, siempre se debe someter a juicio lo que se hace. El periodista nunca está satisfecho con lo que es, ni con lo que hace, por eso siempre se está reinventando. La ética, por tanto, es la pasión de crearse a sí mismo todos los días”.

El periodista nacido en Jericó, Antioquia, en 1932, recibió el Premio CPB en la categoría de prensa en 1993 y el Mérito Periodístico Guillermo Cano del CPB en 2015, por eso desde este organismo, integrado por sus colegas, señalan que “su partida representa una pérdida sensible”. Gloria Vallejo, presidente de la agremiación periodística dijo: “Se nos fue el faro, la guía, en momentos de cambio, de transición del ejercicio periodístico. Sus enseñanzas y sus principios: para ejercer un buen periodismo ante todo se debe ser un buen ser humano, permanecerán por siempre entre nosotros “.

La más reciente aparición en público de Javier Darío Restrepo fue el pasado viernes, 5 de octubre, en el Festival Gabo en Medellín dónde presentó su libro ‘La constelación ética’ y donde recordó que “el gran reto del periodismo debe ser el de conservar su identidad profesional, porque las nuevas tecnologías y las mismas condiciones sociales conspiran en su contra”.

En muchas de sus conferencias era enfático al señalar que “hoy no hay una identidad clara sobre el periodismo. La tecnología ha contribuido con la idea difusa de gente que se siente periodista porque con cualquier medio o aplicativo puede captar noticias, difundir datos y su pensamiento en blogs”.

Gloria Inés, una de sus hijas, asegura que hay muchas cosas que pueden describir a su padre como periodista, entre ellas, “un rigor enorme, una disciplina gigante y el compromiso de sacar cualquier tarea”.

Y lo decía él mismo, “un buen periodista es alguien que ha logrado controlar el hecho de sentirse más, entre mucha gente, un mal periodista es el que se mueve estimulado por su vanidad”.

Sus honras fúnebres serán este lunes 7 de octubre, a partir de las 10 de la mañana en el Parque Cementerio Los Olivos en Bogotá, Kilometro 1.7, vía Siberia.

"Que lo acompañen todos los que lo querían, seremos muchos, miles”, destaca un mensaje de su familia.