Reclaman más atención de Gobierno Nacional para Santander
Por: Diego Suárez
Modificar el decreto 1500 del Invima que pretende exigir altas condiciones de calidad en el proceso de sacrificio de ganado y que hoy tiene a punto de cerrar a los mataderos municipales, reclamó el gobernador de Santander, Didier Tavera, al alto consejero presidencial para las Regiones, Carlos Eduardo Correa, durante su visita al departamento.
Al finalizar la actividad de Gobierno en las regiones, el mandatario seccional sostuvo que este es un acto administrativo lesivo que exige inversiones por el orden de los 30 mil millones de pesos en las plantas de beneficio animal de los municipios de Santander. “Si no nos dan, que no nos quiten”, sentenció.
Añadió el gobernador Tavera que las gerencias integrales del Banco Agrario fracasaron, pues “no se pueden estructurar proyectos desde el escritorio, sin conocer la realidad de los municipios”.
El mandatario criticó la poca efectividad de la contratación por parte de firmas extranjeras y dijo que muchas de esas obras estaban siniestradas. Puso como ejemplo la vía Yuma en Barrancabermeja que adelanta la firma portuguesa Mota Engin, y el puente de Hisgaura en la carretera Curos – Málaga, construido por la empresa Sacyr, de España, donde se registró un accidente que le costó la vida a tres trabajadores y presenta serios retrasos
Por su parte, el alto consejero aseguró que durante estas jornadas “26 entidades estuvieron acompañándonos, tuvimos la visita de 27 alcaldes, un total de 88 solicitudes de proyectos, de trámites, de gestión”. El acto que pretendía que el Gobierno Nacional conociera las necesidades del departamento se desarrolló en las instalaciones del Sena en Bucaramanga.
Correa destacó tres temas 'gruesos' propuestos por el gobernador de Santander, y que serán atendidos prontamente por el Gobierno Nacional: “Sacar adelante el proyecto que viene atrasado del Centro de Convenciones; impulsar los permisos del Ministerio de Ambiente y la ANLA para el relleno sanitario de Bucaramanga y desentrabar los proyectos de vivienda que vienen atrasados hace casi cinco años del Pacto Agrario que hoy todavía tienen problemas.
