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Imputan cargos por explotación de menores a dos extranjeras en Bucaramanga

Autoridades alertaron por el incremento en la instrumentalización de niños para pedir limosna.

Tras una investigación desarrollada por autoridades en Bucaramanga se logró la captura de dos mujeres que, al parecer, estaban explotando a una menor de edad para que pidiera dinero en el centro de Bucaramanga.

Las mujeres, de nacionalidad venezolana, evadieron la respuesta cuando se les preguntó si la menor tenía algún parentesco con ellas, por lo que se pudo deducir que la niña no hacía parte de su núcleo familiar.

El general Luis García, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, explicó que debido a “la información de la comunidad se logró sorprender a dos mujeres quienes no pudieron explicar por qué tenían a una niña de dos años pidiendo limosna. Allí hubo una intervención de la Policía Nacional y se capturaron a estas personas".

Por su parte, el secretario del Interior, José David Cavanzo, informó que como estos ya son 20 los casos que se han trasladado a las Comisarías de Familia. “Están usando a los menores para explotación laboral. Vamos a seguir haciendo los controles de manera contundente en compañía de Migración Colombia y las demás autoridades sobre todo los los sectores álgidos de Bucaramanga y que tienen flujo de migrantes y de población que se encuentra en estado de calle”, aseguró.

Por ahora las capturadas fueron dejadas a disposición de la Fiscalía General de la Nación para que les defina su situación jurídica. Entre tanto, la niña fue dejada disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) para el ejercicio del restablecimiento de derechos y para que se le brinden las condiciones básicas de salud.

La Policía invitó a toda la comunidad a que denuncie estos casos a la línea única de emergencia 123.

Sin embargo, hay preocupación en la ciudadanía por el incremento de la pobreza y la falta de ingresos que ha llevado a personas tanto colombianas, como migrantes, a pasar del rebusque a la mendicidad, en una ciudad donde no hay albergues y las guarderías públicas permanecen cerradas tras la pandemia.

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