Tras culminar su acto de posesión como presidente de la República, Gustavo Petro se dirigió a la Casa de Nariño, donde las Fuerzas Armadas le hicieron un reconocimiento.
Pasadas las 4:30 de la tarde, el nuevo presidente de Colombia caminó de la mano de su esposa, Verónica Alcocer, desde la Plaza de Bolívar hasta la Casa de Nariño.
Al llegar, la cúpula militar lo recibió y juntos recorrieron la Plaza de Armas, bajo una ceremonia militar que estuvo enmarcada en trompetas y tambores.
Al finalizar, y en la entrada de Palacio, lo esperaba el expresidente Iván Duque, quien en un acto frío y rápido se saludó con Petro y salió de la Casa de Nariño con los abucheos de la gente de fondo.