“La música de tiple toca las fibras del corazón”: Miguel Gamboa
Por: Laura Ramírez León.
Recorrimos los límites entre Boyacá y Santander en la búsqueda de sus melodías. Iniciamos una travesía en el corazón de dos regiones conectadas por los sonidos de las cuerdas del tiple y el requinto.
En la búsqueda de los orígenes de ambos instrumentos, encontramos el trabajo del trío ‘Corbaraque’ de Suaita (Santander). Tres amigos que, desde hace más de 15 años, se han dedicado a mantener vivo el folclor de su región en las nuevas generaciones.
Paralelo a la Fundación Jardín del Sol de Suaita, el grupo musical da a conocer el valor del folclor de tierra santandereana y el acervo cultural de toda una nación. Destacando sus tradiciones musicales y perpetuando en el imaginario colectivo el que se ha considerado como el instrumento más colombiano de todos, el tiple.
El grupo conformado por Miguel Arcángel Gamboa, Germán Noguera y Carlos Ciro Cepeda, hoy dedica su tiempo a sembrar conocimiento, disciplina, pero, sobre todo, pasión por la música andina en tierras santandereanas.
“Hace 15 años en Suaita creamos el grupo musical ‘Corbaraque’ y la Fundación Jardín del Sol. Desde esa época le enseñamos a jóvenes a tocar el tiple y la guitarra. Buscamos que nuestra música no se pierda. Por medio de nuestra fundación trabajamos proyecto con el Ministerio de Cultura para que las nuevas generaciones no olviden el sonido de nuestro instrumento”, comenta Carlos Ciro Cepeda.
Para este grupo de hombres, que desde hace más de 40 años se dedica a la música de manera empírica, existe una amenaza para el folclor de estas tierras.
“La música de tiple toca las fibras del corazón, la gente reacciona muy lindo cuando uno le pone este tipo de música. Lo que pasa es que a la gente ya no se le pone a escuchar música colombiana como antes. Hay que recordar que el oído se educa, y en Colombia desde por la mañana le están poniendo música de afuera a las personas. Si a la gente no le ponen un ‘bambuquito´ o un torbellino en los medios de comunicación, no se fomenta nuestra música”, afirma Miguel Arcángel Gamboa Ariza.
“El tiple es un instrumento muy especial, el sonido de sus cuerdas puede ser alegre y melancólico. Cuando escucho sonar un tiple me dan ganas hasta de llorar”: Miguel Arcángel Gamboa.
De igual forma, ‘Corbaraque’ considera que uno de los principales problemas a la hora de incentivar el folclor de la región es la falta de apoyo por parte de las administraciones locales.
“En nuestra tierra falta mucho apoyo. Para los alcaldes de esta zona del país hacer ferias es que la gente tome y escuche música norteña. La música del pueblo es la más abandonada. Nosotros hemos dejado nuestra vida en conservar la música tradicional de tiple. Yo llevo 50 años dedicado a esto, por eso enseñamos, porque nuestra intención es perpetuar nuestro legado musical, trabajar por no dejar que se acabe nuestro folclor”, agrega Miguel Gamboa.
“Cuando vemos un niño que empuña su tiple, para nosotros es una alegría inmensa. Sentimos que estamos cosechando lo que hemos sembrado toda una vida”: Carlos Ciro Cepeda.
