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El Socorro, el rinconcito amable de José A. Morales

Por: Laura Ramírez León. Como ‘Un rinconcito amable’, título de una de las grandes composiciones del maestro José A. Morales, se le conoce en El Socorro (Santander) a la Casa de la Cultura Horacio Rodríguez Plata. Un lugar donde se mantiene vivo el legado del cantor de la patria, el lugar donde hoy descansa su cuerpo.

Foto: Laura Ramírez.

Por: Laura Ramírez León.

Como ‘Un rinconcito amable’, título de una de las grandes composiciones del maestro José A. Morales, se le conoce en El Socorro (Santander) a la Casa de la Cultura Horacio Rodríguez Plata. Un lugar donde se mantiene vivo el legado del cantor de la patria, el lugar donde hoy descansa su cuerpo.

El 21 de septiembre de 1978, el país se despertó con profunda tristeza y sorpresa al enterarse de la muerte de uno de los más grande compositores e intérpretes que ha dado Colombia. Partía de mundo terrenal el autor de ‘Pueblito viejo’, ‘Ayer me echaron del pueblo’ y ‘Un rinconcito amable’, de un sinnúmero de temas que aún se escuchan en los aires andinos de Colombia y el mundo.

Foto: Laura Ramírez.

El niño cantor que apareció hacia 1920 interpretando el tiple, se convirtió rápidamente en la atracción del cuarteto conformado por el sastre Barragán y por los negros Durán Venegas. Esos que iban de escenario en escenario alegrando el corazón de muchos en la provincia de Vélez.

Foto: tomada del libro Centenario del natalicio del maestro José A. Morales.

Hoy, los restos del afamado compositor descansan en la Casa de la Cultura Horacio Rodríguez Plata, al fondo, junto a un tranquilo jardín que recibe cada día los rayos del sol. José a Morales descansa tal como alguna vez lo describió en sus letras.

“Estoy buscando un rinconcito amable en donde descanse en paz mi cuerpo enfermo”, ‘Rinconcito amable’, José A. Morales.

Foto: Laura Ramírez.

Luego de 40 años de la partida del cantor de la patria, en Travesías de Tiple y Requinto llegamos hasta su pueblo natal. Allí hablamos con Pedro Manuel Pérez, actual director de la Casa de la Cultura Horacio Rodríguez Plata, sobre el legado de José. A. en El Socorro (Santander).

“Cuando José A. Morales falleció, Socorro y la Casa de la Cultura nos convertimos en la viuda y los huérfanos del maestro Morales. Nuestra intención fue continuar haciendo lo que en vida él había hecho por el Socorro, quererlo y respetarlo. Llevamos 28 años haciendo homenajes a la vida y obra del maestro, en la Casa de la Cultura tenemos todas sus canciones y cien fotografías del artista, que murió en Bogotá el 22 de septiembre de 1978, tras componer más de 200 canciones”, comenta Pérez.

Foto: Laura Ramírez.

Una vez que Morales falleció y gracias a la colaboración de su hija doña Josefina Morales de Rodríguez, se dio inicio a la recolección de sus pertenencias, esas que hoy hacen parte del museo.

“En sus letras el maestro describió qué era lo que quería para su descanso eterno. Con nuestro trabajo creemos que se lo hemos dado”; añade Pedro Manuel.

Reza un refrán popular que nadie es profeta en su tierra. Pero ese no es el caso del cantor de la patria. En Socorro se respira el legado de José A, Morales, los socorranos llevan de generación en generación no solo el legado musical del maestro, también reviven el amor que siempre profesó por su tierra natal.

Foto: Laura Ramírez.

“José A. no fue profeta en su tierra, José A. fue rey en su pueblo. Cuando el regresaba a su pueblo de largos viajes, en El Socorro había una fiesta colectiva”, recuerda Pedro.

José A. Murió para empezar a vivir aún más, su recuerdo ha sido permanente. Ejemplo de ese legado fue la creación de Concurso Nacional de la Canción Inédita José A. Morales que se celebra cada año durante el mes de septiembre en Socorro.

“Este evento lo que ha buscado durante años es mantener vigente nuestra música andina colombiana, buscando que el legado de Morales no desaparezca. Llevamos ya 25 años dejando en alto su legado musical en esta su tierra, El Socorro”: comenta Pérez.

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