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Por inundaciones, 3 mil estudiantes se quedaron sin clases en Riosucio, Chocó

Directivos académicos se vieron en la obligación de suspender clases a raíz de las constantes inundaciones que tienen en emergencia al municipio.
Yofhary Chalá

Más de un mes completa la cabecera municipal de Riosucio y algunas comunidades rurales (como Los Coquitos, Pedeguita y Santa María) inundados, lo que tiene en emergencia a varios sectores del territorio, obligándolos a reestructurar sus actividades, como es el caso de las instituciones académicas.

“Todos sabemos que la temporada invernal siempre ha sido traumática para nosotros, pero esta vez la inundación se vino de manera súbita y a todos nos cogió de manera desprevenida. Creímos que la cuota iba a disminuir, pero al contrario, subió su nivel de manera desmesurada, situación que nos obligó a tomar determinaciones para proteger a los estudiantes del municipio”, expresó el secretario de educación local, Martín Escobar Arroyo.

La decisión se pactó en un comité realizado por la Secretaría de Educación conjuntamente con directivos de las diferentes instituciones, Gestión del Riesgos y algunos miembros de la comunidad, donde se acordó trabajar a través de guías que los docentes entregarán a los padres de familia para que los estudiantes trabajen en casa. No se decidió hacerlo de manera virtual porque la conectividad es bastante inestable.

Como acción preventiva, el director de Gestión de Riesgo local, Jorge Durán Moya, respaldó lo acordado teniendo en cuenta que el PIC (Plan de intervenciones colectivas) presentó registros de muertes por ahogamientos en menores en años anteriores.

“Buscando minimizar la pérdida de niños por inmersión, como también los diferentes accidentes que se presentan, porque se caen, se parten un brazo o algo parecido. El nivel del agua en las instituciones es tan alto que ya no hay forma de hacer los llamados tabiques”, manifestó Durán.

Por su parte, Pedro José Palomeque, rector de una de las instituciones educativas, resaltó que “nosotros como rectores nos vamos conformes con las conclusiones que se han sacado y que después de que pase esta inundación, de verdad la administración vaya, nos visite, haga un diagnóstico y también nos dé solución a esas necesidades que se generan después de la inundación, porque luego de la inundación queda en detrimento de algunos espacios, y la idea es que vuelvan a la normalidad, pintándolos, reparándolos”.

El director de Gestión de Riesgos agregó que el nivel del agua actual está a punto de alcanzar la pasada inundación de 2010, que ha sido la más alta de los últimos años.

“Ya hay partes en las calles que tienen más de dos a tres metros de profundidad. En las calles principales estamos hablando de un metro o mucho más”, aseguró.

Por ello también se han visto muy afectados otros sectores como comerciantes, agricultores, transportadores terrestres y el deterioro de algunas infraestructuras como los puentes de madera.

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